¿Por qué el esquema 7+7 aplicado por el gobierno de Maduro no funciona?

Mientras la mayoría de países aplicaron un confinamiento más o menos estricto pero continuado, en Venezuela se estableció, desde junio de 2020, una inusual cuarentena intermitente, conocida como el sistema 7+7, en la que se alternan las restricciones con la relajación de las medidas.

En aquel entonces, fue la vicepresidenta ejecutiva, Delcy Rodríguez, quien anunció en un mensaje televisado los detalles de la cuarentena venezolana: “Siete días de trabajo más siete días de cuarentena. Pero debe ser una cuarentena rigurosa, disciplinada”, dijo.

Desde ese entonces, el gobierno de Nicolás Maduro aplicó ese esquema, excepto en noviembre y diciembre de 2020 y 2021, cuando decidió extender la flexibilización de la cuarentena, ante la aparente reducción de casos de COVID-19 en el país y por el comienzo de las fiestas navideñas.

Este 4 de enero, Nicolás Maduro expresó que no habrá más método 7+7 de momento y que este se activará cuando haga falta.

¿El esquema 7+7 funciona?

Es una interrogante que se ha planteado desde el inicio de la medida, donde especialistas han asegurado que este método no tiene ningún basamento científico y que no puede frenar el aumento de casos.

«El 7+7 nunca ha sido un método que se escogió por basamento científico, sino por conveniencia política. Si usted estuvo en contacto con alguien que tienen COVID-19, entre 7 y 14 días pueden empezar a tener síntomas. Lo ideal de las cuarentenas es que sean entre 10 y 14 días entre una y otra», explicó a El Pitazo Alejandro Crespo, pediatra y presidente de la Asociación Venezolana de Puericultura y Pediatría del estado Aragua.

El especialista agregó: «Nosotros creemos que la última flexibilización fue una decisión política. Ya la gente estaba en el calle a pesar de lo que pasaba con el COVID-19. Lo que hicieron fue oficializar algo que ya la gente estaba haciendo, donde además estaba el cierre de una campaña política y decidieron que para el cierre de sus elecciones iban a permitir eventos masivos».

Crespo señala que se deben aplicar métodos que están comprobados que funcionan. «Ese sistema no funciona porque no tiene basamento científico. Hay que hacer pruebas, búsqueda de contacto y aislar a todo el que salga positivo y a sus contactos estrechos. Eso funciona en el mundo, pero requiere una inversión de recursos humanos y financieros que el Estado no quiere hacer», refirió el especialista.

Por otra parte, el exministro de Salud, José Félix Oletta, en una entrevista para Punto de Corte, criticó a finales de 2021 la idea del gobierno de aliviar las restricciones en los últimos meses del año con el fin de permitir un mayor movimiento de la economía. “En junio de 2020, cuando se pasó de una situación de absoluto confinamiento al 7+7, automáticamente vimos la primera verdadera onda. Eso pasó cuando se planteó el 7+7”, recordó.

“Y en noviembre de 2020, que fue seguido de un mes completo flexible y luego dos períodos adicionales, conllevaron a la segunda gran onda«, añadió.

El médico internista e infectólogo, Julio Castro, en una entrevista en julio de 2021 para el circuito Onda 107.9 FM, sobre una posible eliminación del esquema 7+7 para pasar a una flexibilización amplia de la cuarentena por el coronavirus, señaló que los cambios en la movilidad de la población entre las semanas flexibles y radicales son pocos.

En ese sentido, dijo que si se evalúa desde ese punto de vista el nivel de transmisión sería el mismo si se mantiene o elimina la medida. Sin embargo, manifestó preocupación ante una posible falsa sensación de seguridad en caso de que se levante el esquema 7+7 porque la realidad en Venezuela es que no están controlando la pandemia.