Augusto Mata y Elizabeth García son los padres de Ender Mata, de 23 años, una de las personas que resultó herida el 7 de mayo de 2023 cuando un conductor embistió a un grupo de migrantes en una parada de autobuses en la ciudad de Brownsville, Texas, Estados Unidos. Ambos quieren viajar al país norteamericano y para ello piden ayuda al presidente Nicolás Maduro.
“Queremos que nos exoneren el costo del pasaporte, porque no tenemos cómo cubrir ese gasto. Cada uno debemos cancelar 257 dólares”, explicó Mata a El Pitazo, vía telefónica, en horas de la tarde del 10 de mayo.
Más temprano, la pareja fue a la sede del Servicio Administrativo de Identificación, Migración y Extranjería (Saime), ubicada frente a la plaza Miranda en Caracas. Allí les informaron el monto del cual debían disponer. Luego fueron a Miraflores y dejaron una comunicación dirigida al presidente Nicolás Maduro. Posteriormente, los atendieron en la Cancillería.
“Nos dijeron que quien nos puede ayudar es el presidente Nicolás Maduro, por ello le hacemos un llamado urgente. Queremos estar con nuestro hijo, él nos necesita en este difícil momento”, indicó Mata, quien además espera que le concedan una visa humanitaria para poder pisar suelo estadounidense.
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Una hora antes todo iba bien
El joven Ender Mata emigró a Perú en 2018. Cuatro años más tarde regresó a su casa, ubicada en la urbanización Nueva Virginia de Santa Lucía, en los Valles del Tuy, estado Miranda. Sus aspiraciones eran quedarse en Venezuela, pero su situación económica y sus deseos de superación lo llevaron a emprender otra travesía hasta llegar a Estados Unidos, luego de pasar por Colombia, la selva del Darién -donde celebró su cumpleaños el 28 de abril-, Panamá, Costa Rica y México, entre otros.
En el recorrido demoró casi un mes. Una vez que llegó a Estados Unidos se entregó a las autoridades migratorias y fue recluido en un refugio. Su novia y un amigo viajaban con él, pero fueron enviados a albergues diferentes.
El jueves 4 de mayo, el muchacho fue liberado; sin embargo, se quedó en la ciudad de Brownsville en espera de su amigo, a quien dejarían salir del refugio el domingo, 7 de mayo, pero eso no ocurrió.
A las 7:18 a.m. de ese día, Ender llamó a su papá para contarle que todo iba bien y que se disponía a buscar a su novia, quien estaba en un refugio ubicado a cinco horas de Brownsville. Una hora más tarde, el joven fue trasladado en ambulancia al Valley Regional Medical Center.
“Desde el día del arrollamiento está sedado en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI). Está grave, tiene un traumatismo en la cabeza y en la clavícula. Va mejorando poco a poco, pero estamos desesperados, porque, tanto su mamá como yo, queremos estar con él”, señaló Mata con la esperanza de recibir la ayuda que necesita.
En el mismo centro asistencial se encuentra recluido Andreivis Contreras, también residenciado en Santa Lucía y amigo de Ender. Según Mata, el estado de salud de este muchacho es igualmente delicado.
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