Los residentes del sector 30 de Julio se quejaron por los elevados precios de las cajas de los Comités Locales de Abastecimiento y Producción (Clap), que pretenden venderles a través de la Empresa de Producción Social (EPS) Comercializadora de Alimentos, de la Gobernación de Sucre. Para manifestar su descontento, algunos residentes hicieron tres cierres en una misma vía.
Aurimar Rondón, habitante del lugar, instó a los encargados de realizar la distribución de los alimentos en la entidad, a vender las cajas de los Clap a los precios señalados por el Ejecutivo nacional.
Rondón fue enfática al reclamar: «Gobernador Edwin Rojas y Francisco Tavera, presidente de la comercializadora, vendan la comida a los precios que fijó el presidente, Maduro».
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La vecina precisó que la caja del Clap debe venderse en 25.000 bolívares. «Somos personas de bajos recursos y vivimos en pobreza extrema, por eso no tenemos para cancelar el Clap en 108.000 bolívares», añadió.
Asimismo, Francis Gracia expuso la situación que presentan 189 familias que residen en esta zona de la capital del estado Sucre. “Los niños están en estado de desnutrición y no tenemos plata para comprar esa caja del Clap en 108.000 bolívares”, dijo la protestante.
Además del reclamo de los residentes del sector 30 de Julio, este jueves 18 de enero se registró una protesta en la calle Cajigal de la capital de esta entidad oriental. 648 familias que habitan en esa calle de la ciudad manifestaron pacíficamente frente a las instalaciones de Empresa de Producción Social (EPS) Comercializadora de Alimentos, de la Gobernación del estado. Dayana Chacón explicó que esta compañía no está cumpliendo con los acuerdos firmados con los vecinos porque se está retrasando en la venta de las cajas del Clap.