Caracas.- El ingeniero civil y expresidente de Hidrocapital, José María De Viana, explicó a El Pitazo que uno de los factores que ha causado deslaves en Aragua son las precipitaciones que han caído durante los últimos 15 días. Las lluvias permearon los suelos hasta provocar grandes movimientos tierra en las montañas, que desembocaron en zonas habitadas de El Castaño y Las Tejerías.
Precisó que los sistemas de alerta temprana –como los que fueron instalados en El Limón después de la tragedia que cobró cientos de vida en 1987– son necesarios para resguardar la vida de los ciudadanos.
Al menos tres personas murieron el pasado lunes 17 de octubre por el desbordamiento de quebradas y un alud en el sector El Castaño, en Maracay. Hasta el momento, hay cinco personas desaparecidas y 50 familias afectadas, cuyas viviendas resultaron cubiertas por el lodo, según el reporte de las autoridades.
Una semana antes de lo ocurrido en El Castaño, Aragua sufrió el desastre de Las Tejerías. Hasta el momento la cifra de fallecidos por este hecho se ubica en 54 plenamente identificados, mientras que los desaparecidos son superan los 50.
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«No ha sido una lluvia de gran fuerza, pero si persistente (especialmente en las cimas de las montañas). Está lloviendo desde hace 15 días seguidos y eso es un factor determinante», dijo en una llamada telefónica con El Pitazo.
La creación de un sistema de alerta temprana
De Viana explicó que este tipo de desastres ocurren en zonas con una formación topográfica determinada: una cuenca escarpada donde haya pendientes muy inclinadas y una condición de los suelos zona con muchas formaciones geológicas como existe en El Castaño.
«Las rocas que observan en las fotos no están hechas por el hombre, son rocas naturales. Vinieron de bosque virgen, la intervención humana no tuvo nada que ver», detalló.
El ingeniero afirmó que con la creación de un sistema de alerta temprana se puede advertir a las poblaciones sobre los deslizamientos de tierra. En ese sentido, se hubiera evitado la cantidad de fallecidos, heridos y afectados por los recientes deslizamientos de tierra en Aragua.
El también profesor de la Universidad Católica Andrés Bello (Ucab) destacó que con este sistema de alerta inmediata se evitarían perdidas humana, aunque no materiales.
«Con esto se evitan muertes, pero no lo material eso no está en discusión. Lo que se busca es que no hayan perdidas humanas», exclamó el ingeniero.
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Venezuela tuvo un sistema de prevención
Tras la tragedia de El Limón, ocurrida el 6 de septiembre de 1987 cuando en un deslave proveniente de los cerros del parque nacional Henri Pittier, ocasionado por grandes torrenciales de lluvia que arroparon las montañas en las zonas urbanas del estado Aragua causando 100 personas muertas, cientos de desaparecidos, 300 heridos y miles de damnificados, se instaló con ayuda de asesores japoneses un sistema de prevención con guayas y el movimiento de los suelos.
De Viana afirmó que este sistema funcionó solo 10 años en el sector. Según el ingeniero, es necesario que Venezuela vuelva a tener un sistema de prevención ante estos desastres que se pueden repetir.
«Si se hubiera dicho 24 horas antes a las personas de Las Tejerías que algo de esa magnitud pudiera ocurrir se hubieran salvado muchas personas (…) si solo hubieran corrido unos 50 metros más», aseveró De Viana.
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