La situación del alza de las matrículas escolares genera intranquilidad en muchos padres caraqueños. Algunos confesaron a El Pitazo que han tenido ataques de ansiedad o les cuesta conciliar el sueño porque desconocen cómo hacer para mantener a sus hijos en una institución privada, en medio del declive en el que se encuentran las instituciones públicas
Una madre de 31 años sintió un mareo y un pequeño dolor en la cervical -que aumentó hasta convertirse en una presión en el pecho- al enterarse de que la mensualidad de un preescolar en Los Caobos, en Caracas, donde estudia su hija de 2 años, aumentaría de 90 a 180 dólares.
La progenitora define este episodio como un ataque de ansiedad, según le ayudó a identificar un amigo paramédico. Cree que ese malestar se desencadenó luego de conocer el aumento del 100 % de la cuota de escolaridad y escuchar el rumor de que en su nuevo empleo cancelan los honorarios profesionales con demoras.
La institución de educación inicial alega que este incremento se debe a que en el próximo año escolar será inscrita una menor cantidad de niños, por lo que se vieron obligados a ajustar sus precios. Jaimes entiende la medida, porque conoce otras escuelas que son más costosas, pero admite que su presupuesto se verá más ajustado.
Es muy desesperante, da mucha ansiedad
Stefanía Uzcátegui, madre de una preadolescente de 12 años
Algo parecido le ocurre a Stefanía Uzcátegui, madre de una adolescente de 12 años, quien asegura que el incremento en la mensualidad del Colegio San Martín, en la avenida San Martín de Caracas, es un tema que le genera preocupación, porque el aumento que fue aprobado por la Superintendencia Nacional para la Defensa de los Derechos Socioeconómicos (Sundde) es de 62,5 %.
En este sentido, la cuota de escolaridad pasará de 40 a 65 dólares, lo que significa un pequeño logro para los padres y representantes, pues, en principio, las propuestas que tenía la institución planteaban llevarla a 80 dólares.
Sin embargo, algunos todavía se sienten inconformes porque este monto no fue discutido en una asamblea presencial, sino que fue acordado sin la voz y el voto de la comunidad de padres y representantes, algo que ellos ven necesario para garantizar que la mensualidad que se aplique sea aprobada por más del 51 % de los integrantes de la institución. Abogan por un acto donde puedan constatar quiénes están conformes con ese monto o se permita su discusión.
“Es muy desesperante, da mucha ansiedad. Además es angustiante porque yo soy madre soltera y ya 40 dólares me cuesta pagarlo, porque no es solamente la mensualidad del colegio. Tenemos muchos más gastos. Son tantas cosas que se unen, como los gastos fijos”, narra Uzcátegui a El Pitazo.
Asimismo, asegura que su presupuesto familiar se vería comprometido con el incremento de la cuota de escolaridad porque la situación económica de su área profesional, que es el marketing y la publicidad, enfrenta algunas dificultades.
Aumentan mensualidades, pero no los salarios
Para algunos, esta medida es una preocupación, puesto que tienen que cancelar mayores costos por la educación de sus hijos, pero sus salarios no han tenido aumentos y, en algunos casos, no tienen ni esperanza de que se los suban, como es el caso de Virginia González.
“Consulté a mi jefa y la respuesta que me dieron es que no, no hay aumento de sueldo para mí”, dijo González, madre de otra niña que también cursa su bachillerato en el Colegio San Martín.
González, además, es parte del Comité de Cultura y le resulta llamativo que, pese a formar parte de este ente interno, no se le haya consultado con anticipación el incremento, una medida que, supuestamente, ya había sido debatida con los integrantes de estas organizaciones.
“No queremos violentar al colegio ni que haya problemas. Menos queremos que lo cierren porque nuestros niños son los que se van a afectar y perjudicar, pero sí abogamos por una justa respuesta y aumento”, dice Uzcátegui.
La madre de la adolescente de 12 años indica que si lamentablemente no se llega a un monto que pueda pagar va a tener que sacar a la niña del colegio. Considera que esta situación vulnera su derecho de brindarle a su hija una educación de calidad ante el declive que atraviesa la educación pública en el país.
Una situación similar enfrenta la madre de un estudiante del colegio San Agustín de El Marqués, a quien le tomó por sorpresa la propuesta de aumento y ahora debe buscar opciones porque, de aprobarse, no podría mantener a su hijo en esa institución. La representante, quien es madre soltera y prefirió resguardar su identidad, dijo que el año pasado le subieron 30 dólares, pero ahora el incremento sería de 72,22 %, al pasar de 90 a 155 dólares, de ganar la propuesta más baja de las presentadas esta semana, cuando se comenzó a discutir el tema de las cuotas de escolaridad.
“Es tarde para buscar colegio nuevo, entonces, muchos padres no saben qué van a hacer, porque primero habría que pagar todo el colegio hasta agosto y hay unos que estamos retrasados, y después ponerte a buscar colegio”, dijo.
Esta madre recalca que el tema de cambiar de colegio tampoco es tan sencillo porque se requiere el costo de la inscripción que, en algunas instituciones, son 400 o 500 dólares para los nuevos ingresos más el costo de la mensualidad.
El Pitazo consultó a otros colegios y comprobó que hay cuotas de escolaridad de 330 dólares e inscripciones de 1.050 dólares, como la del Colegio Roraima en La Trinidad, o la de Las Terrazas, donde la inscripción está en 290 dólares con mensualidades que van desde 108 hasta 180 dólares, según el horario disponible.
No es solamente la mensualidad del colegio. Tenemos muchos más gastos
Stefanía Uzcátegui, madre de una preadolescente de 12 años
Sincerar presupuestos
Uzcátegui y González denuncian que el colegio San Martín presentó presupuestos que no corresponden con los gastos reales o que incluso se les cobra por cláusulas que no aplican o que sus hijos no pueden disfrutar. Una de ellas es la entrega de becas, sobre las que conocen poco de las condiciones para solicitarla y cuyos detalles se negaron a ofrecerles. Otros de los gastos que mencionan son el costo del servicio de internet, pese a que los estudiantes usan sus datos móviles para las investigaciones; la renovación de equipos deportivos y culturales, cuando los niños aseguran que utilizan balones viejos y que no han ampliado el inventario de colchonetas; o los servicios de bibliotecas, pese a que no cuentan con estas instalaciones.
Marisela Pérez, representante de una joven en el Colegio Santo Tomás de Aquino, en Campo Alegre, añade que la mensualidad para el periodo que está próximo a finalizar 2022-2023 se ubica en 127,14 dólares y, de las 3 propuestas que presentaron, se aprobó llevar la cuota de escolaridad a 199,17 dólares, lo que representa un aumento de 56,65 %.
No queremos violentar al colegio ni que haya problemas
Stefanía Uzcátegui, madre de una preadolescente de 12 años
Otro representante del colegio Santo Tomás de Aquino, quien prefirió el anonimato, asegura que no se niega a que se les suba el salario a los docentes o que su intención sea bajar la calidad del colegio, sino que consideran que la estructura de costos está inflada.
“Tienen supuestamente un internet satelital que cuesta 1.500 dólares al mes, lo que es un servicio sobredimensionado y, además, cobran un transporte escolar de 1.300 dólares al mes y mi chamo este año ha salido 2 veces de paseo”, cuenta la madre.
Intimidados por el colegio
La representante del colegio Santo Tomás de Aquino, quien prefirió el anonimato, indica que los padres, representantes y personal docente fueron intimidados durante el proceso de votación para elegir alguna de las opciones planteadas. Incluso, advirtió que el formulario que usaron para la elección es abierto, motivo por el cual puede participar cualquier persona que no esté relacionada con la institución, lo que afecta la credibilidad y transparencia de la herramienta.
Pérez asegura que ante esta situación, los representantes han enviado al menos cuatro cartas a la Sundde para denunciar estos hechos y pedir que intercedan para llegar a una cuota de escolaridad que beneficie a todos.
La situación del alza de las matrículas genera intranquilidad en muchos padres, porque desconocen cómo hacer para mantener a sus hijos en una institución que les brinde una educación de mejor calidad que la pública, donde los profesores no van los cinco días de la semana debido a los bajos salarios que perciben.
Los gastos operativos … se han incrementado más de 2.000 %
Fausto Romeo, vicepresidente de la Andiep
¿Qué dicen los expertos sobre estos aumentos?
El analista financiero y director de Albusdata, Henkel García, aseguró a El Pitazo que el servicio de educación es uno de los rubros que más aumentó en el último año, y eso se debe a que estaba rezagado en cuanto a sus precios.
Según los datos del Banco Central de Venezuela (BCV), la educación privada es uno de los servicios que más subió de precio al incrementarse 942,27 % entre abril de 2022 y abril de 2023.
El vicepresidente de la Asociación Nacional de Institutos Educativos Privados (Andiep), Fausto Romeo, afirmó hace unos días a El Pitazo que los colegios privados tendrán que aumentar para cubrir sus gastos de operatividad, unos aumentos que responden al alza que se ha registrado en los servicios públicos, como aseo, agua y electricidad.
“Los gastos operativos, de un año para acá, se han incrementado más de 2.000 %, por ejemplo: la luz eléctrica en muchas partes se estaba pagando 100 bolívares y de repente te llega a un monto igual a 50 o 60 dólares, que no nos negamos a pagar, pero afecta en el presupuesto”, detalló Romeo en una llamada telefónica.
El vicepresidente de Andiep destacó que el costo del relleno sanitario en una institución puede ir de 100 a 1.500 dólares, porque lo establecen en base al tamaño de la infraestructura. Acotó que el cálculo de este servicio lo establece el Ministerio de Ecosocialismo y Aguas o las alcaldías del país, por lo que es un valor que depende del Estado.
Recalcó que desde Andiep se solicitó que el salario integral para los docentes durante el próximo año escolar sea de al menos 250 dólares, y 200 dólares para el personal administrativo, más las cuotas de profesionalización y antigüedad.
Romeo destacó que para el año 2023-2024 se puede registrar una migración de estudiantes de escuelas privadas con mayor costo en sus mensualidades a otras con menor costo y viceversa.
La Asociación Venezolana de Educación Católica (AVEC) fue consultada sobre estos incrementos en la cuota de escolaridad, pero, hasta la fecha, no hemos recibido ninguna respuesta.
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