Caracas. Atilana Piñón siempre ha sido una persona inquieta. La venezolana–colombiana recuerda con cariño cómo creó una app que permitía digitalizar el pago de estacionamientos en Venezuela antes de fundar la fintech Retorna para enviar dinero al extranjero.
Con esa primera propuesta fue seleccionada para participar en un programa de Start-Up Chile, una gran oportunidad que le permitió desarrollar su proyecto en el país austral. Sin embargo, la empresa no alcanzó sus objetivos.
Entonces, Piñón decidió crear algo nuevo. Tenía el gusanito por resolver un problema que aquejaba a los migrantes que, como ella, necesitaban enviar remesas a sus padres sin que les resultara costoso, lento e inseguro.
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“Cuando me mudo a Chile en el 2017, lo primero que hice fue preguntarles a amigos: ‘Oye, ¿cómo haces tú para mandar plata a Venezuela?’. Mi mejor amigo en ese entonces me manda un contacto de WhatsApp y me dice: ‘Dale con esta persona, no te pongas a inventar, que él es seguro’”, cuenta a El Pitazo.
Esa recomendación no la convenció, principalmente por la falta de seguridad. Así que no paró de darle vueltas a la cabeza para encontrar la manera de crear una plataforma digital para quienes necesitan enviar dinero a sus familias, pero con una serie de ventajas.
Fue así como la emprendedora apostó por una plataforma digital con comisiones más bajas que las entidades bancarias, con transferencias en tiempo real o en cuestión de minutos y, algo muy importante, seguridad en las transacciones.
Así nació Retorna, una app creada para migrantes por una migrante venezolana-colombiana. La aplicación fue lanzada al mercado en Chile a finales de 2019 y rápidamente se expandió a Colombia y Perú con envíos a más de siete países, entre ellos Venezuela y Estados Unidos.
La llegada de la pandemia en el año 2020 puso al mundo en jaque, pero fue una superoportunidad para Retorna, afirma su creadora, que se traduce desde entonces en más de 2 millones de transacciones y alrededor de 20.000 clientes recurrentes cada mes.
En la actualidad, la empresa, integrada por un equipo de 34 personas en 8 países, genera ganancias anuales de 1,5 millones de dólares, asegura Piñón.
El desafío de emprender
En cuatro sencillos pasos, que comienzan con descargar la aplicación para crear una cuenta y luego pasar por un proceso de verificación de identidad para proteger el dinero, la aplicación ofrece a los usuarios diferentes opciones de pago: en efectivo, con billeteras móviles o mediante transferencias bancarias.
“Retorna se enfoca mucho en atender las necesidades de todos, tanto como si tienes o no cuentas bancarias, que es algo difícil para los migrantes en el exterior”, subraya su creadora.
Con su promesa de facilidad, rapidez y seguridad en las transacciones, esta plataforma se propone seguir ganando terreno. Culmina ahora mismo un proceso de levantamiento de capital para cubrir gastos de expansión y desarrollo de servicios financieros adicionales para sus usuarios, como el acceso a créditos.
Asimismo, aspira a engrosar su registro de clientes a 80.000 mensuales al cierre de 2024 y abrir nuevos destinos para enviar dinero, entre ellos Argentina y España.
Atilana Piñón, que tiene 35 años, siente que la profesión de ingeniera industrial le brindó las herramientas para convertir su pasión por resolver problemas en un proyecto desafiante y gratificante.
«Para mí emprender fue un gran desafío. Siendo mujer, joven y migrante sentí que tuve muchas puertas cerradas, sobre todo en el mundo de los servicios financieros, que tienen una regulación muy importante y que está liderada por hombres mayores», señala.
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