Miranda.- La madre de Anderson Cañizalez aseguró que el alcalde del municipio Plaza del estado Miranda, así como los dos que lo antecedieron, estaban en conocimiento del riesgo en el que viven las familias que habitan en la parte alta del sector La Güairita de Guarenas, estado Miranda; sin embargo, ninguno atendió el llamado de los vecinos.
Esa indiferencia cobró la vida de Cañizalez (32 años); de su hija (7) y de su pareja sentimental, Luisiany Daniela Sánchez (17), el sábado 22 de julio, al caerse parte de la vivienda donde residían.
Mueren tapiados dos trabajadores cuando instalaban tubería en la carretera vieja Charallave-Caracas
Ese día se derrumbó un cerro adyacente al inmueble. Las autoridades que acudieron al sitio dijeron que la tierra estaba húmeda, porque días antes había llovido, pero los vecinos afirman que fue por la rotura de una tubería matriz de agua. La casa presentaba filtraciones.
El menor Ricardo Cañizalez, de 8 años, fue el único sobreviviente. Parte de su cuerpo quedó enterrado, pero fue rescatado a tiempo. En el hospital del Seguro Social de Guarenas le diagnosticaron traumas leves por aplastamiento.
¿Dónde está el alcalde?
A través de un video que circuló por las redes sociales, la madre de Anderson Cañizalez aseguró que las autoridades locales están al tanto del riesgo que corren las familias que viven en la parte alta de La Güairita.
Con lágrimas en sus ojos, recordó que pidieron ayuda durante los gobiernos de los exalcaldes Rodolfo Sanz y Luis Figueroa, así como al actual mandatario local, Freddy Rodríguez, pero no obtuvieron respuesta, “y ahora mi hijo, su esposa y mi nieta murieron tapiados”.
“Se me fue mi hijo, un hombre trabajador, luchador, él vivía en una casa de bloques, no en un rancho. Las autoridades sabían que se había caído una parte”, dijo la mujer, visiblemente afligida, el 26 de julio.
La denunciante cuestionó que solo dos funcionarios de Defensa Civil acudieron al sitio. ¿Dónde está el alcalde? ¿Dónde está el gobernador? ¿Qué esperan?, ¿que haya otra tragedia?”, se preguntó.
“El Gobierno debe responder”
La hija de Cañizalez también vive en el lugar. Según aseguró su progenitora, se salvó de morir tapiada, porque estaba de viaje; no obstante, se quedó sin casa.
“El Gobierno debe responder por los seres humanos que vivimos aquí, porque nosotros no construimos en cerros porque queremos, sino porque la situación del país no nos deja vivir decentemente. Si Defensa Civil hubiese tenido esas máquinas especiales que hay en otros países para succionar el pantano, mi hijo y su familia estuvieran vivos”, manifestó.
La mujer refirió que el tanque de agua de la comunidad se está socavando y se puede venir abajo. También indicó que muchas casas están resquebrajadas y sus habitantes viven con miedo, porque no tienen a donde irse.
“¿Dónde está el alcalde que no me ha dado la cara, ni siquiera para ofrecer condolencias? Que me dé respuesta, yo quiero hablar con el alcalde”, reiteró con la esperanza de ser escuchada.
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