20.7 C
Caracas
viernes, 3 mayo, 2024

Isaías Medina: El nieto de Medina Angarita que se le coló al chavismo en la ONU

-

Medina Mejías participó, en nombre de Venezuela, en el comité para la Ley del Mar, la Conservación y el Uso Sostenible de la Diversidad Marina Biológica | Cortesía

Adriana Núñez Moros | @AdrianitaN
Con información de Jessica Carrillo Mazzali | @JessyCarrillo

Una comunicación de cuatro párrafos y una línea puso a Isaac Arturo Medina Mejías en el ojo del huracán el 20 de julio de 2017. Una fotografía de su carta de renuncia corrió como pólvora en las redes sociales ese día. El abogado ocupó, desde 2015 y hasta el 14 de julio de 2017, el cargo de Ministro Consejero de la Misión Permanente de Venezuela ante la Organización de Naciones Unidas (ONU).

Lea también:Lo que no resuelve la ANC | “Vendo en la calle porque me quiero ir del país”

Medina Mejías fue explícito al escribir los motivos que lo llevaron a renunciar: la “inconstitucionalidad” de las actuaciones del Gobierno de Nicolás Maduro, las frecuentes violaciones a los Derechos Humanos de los venezolanos, la vulneración de los derechos a la libre expresión, a la protesta y a la vida; además, manifestó su desacuerdo con la ausencia de independencia en los poderes públicos y la inexistencia de alternabilidad democrática.
Visto de ese modo, podría parecer una carta escrita por cualquiera de los venezolanos que protesta hoy en día en las calles de Venezuela contra el gobierno de Maduro. Pero Medina Mejías no era cualquiera. ¿Por qué un diplomático de alto rango abandonaría a Maduro? ¿Por qué lo haría ahora y no antes? En algunas entrevistas ha dicho que la fuerza del grupo de manifestantes denominado “la resistencia” fue lo que lo impulsó; en otras dijo que la indignación por los asesinados en el marco de las protestas había sido el empujón final. Pero la decisión de alejarse de Maduro y su gente venía gestándose desde antes.
El abogado, en entrevista con El Pitazo, reveló cuál fue el momento definitivo de su ruptura con el Gobierno de Maduro. “Una vez escuché a Rafael Ramírez (representante permanente de Venezuela ante la ONU) decir, frente a los medios de comunicación internacionales, que en Venezuela no había una crisis humanitaria cuando hemos visto que no hay medicinas, que están muriendo los niños de desnutrición, que están poniendo a los recién nacidos a dormir en cajas de zapatos, que la gente está perdiendo miembros porque necesitan hacerse tratamientos”, relató.
Medina habría estado en contacto con miembros de la Misión Permanente Soberana, Hospitalaria y Militar de Malta, quienes habían ofrecido donar, importar y distribuir alimentos en Venezuela. Al elevar la propuesta a sus superiores, la respuesta fue la misma: en Venezuela no hay crisis humanitaria. “Cuando dijo eso (frente a los medios, en mayo de 2017) perdí completamente el sentido de seguir trabajando ahí y de siquiera asistir más a la Misión. No pude asistir más, yo me retiré de la Misión”, explicó.
En ese momento empezó a planear la salida; solicitó un permiso para ausentarse mientras era expedido su pasaporte venezolano. Medina dijo al Diario Las Américas que el 20 de junio acompañó al exgeneral Antonio Rivero a solicitar un embargo de armas al gobierno venezolano ante el Consejo de Seguridad de la ONU. También dijo al diario estadounidense que había sostenido una reunión con Fatou Bensouda, fiscal de la Corte Penal Internacional, para hablar sobre el tema Venezuela.
Tres semanas después del encuentro con Rivero, la carta de renuncia a su primer cargo como diplomático fue sellada como recibida. Rafael Ramírez, su superior, no tardó en calificarlo de “deshonesto” y “condenar su conducta”. Sin embargo, la relación con la familia del expresidente de Petróleos de Venezuela (Pdvsa), como el descontento, era de larga data. Beatrice Sansó de Ramírez e Hildegard Rondón de Sansó, esposa y suegra de Ramírez respectivamente, fueron amigas cercanas a Isaías Medina Serfaty, padre del hoy exfuncionario.
A Medina Mejías le quedó otra amistad como herencia: la de Diego Arria, exgobernador de Caracas, expresidente del Consejo de Seguridad de la ONU y acérrimo opositor del chavismo. “A Isaías lo conozco desde que debe tener como 14 años, algo así, y siempre me llamó tío”, explicó en entrevista telefónica con El Pitazo.
En una entrevista concedida por Medina Mejías a la cadena CNN calificó a Arria como su “mentor”; en la conversación con El Pitazo añadió que no sólo era su mentor, sino que lo quiere “como a un tío”. “Es una persona a quien he admirado muchísimo y siempre he tenido la fortuna de poder contar con sus consejos”, destacó.
“Creo que, de alguna manera, me le escurrí entre los dedos al chavismo. Tomando en cuenta mi formación, que siempre ha sido democrática”, dijo, cuando se le preguntó cómo logró pasar inadvertido ante un Gobierno que practica como norma los despidos por razones políticas. “Yo creo que si me hubiese mencionado mucho lo hubiesen ‘botado’ antes”, completó Arria entre risas.
“Yo creo que si Ramírez hubiese tenido la menor idea de que él me llamaba tío, de que yo era amigo de su padre, creo que no hubiese durado un día. Ellos han ido buscando solo a aquellos que se acomoden al sistema, a la línea”, detalló.

Lea también:VIDEO | Hijo de Maduro “amenaza” con tomar la Casa Blanca si Estados Unidos invade Venezuela

A la ONU de la mano de la suegra de Ramírez

Según Medina fue Hildegard Rondón de Sansó, la suegra de Rafael Ramírez, quien le allanó el camino profesional. “Ella fue magistrada en la Corte Primera de lo Contencioso Administrativo cuando yo era estudiante de Derecho. Yo fui amanuense (transcriptor) en esa corte y ella ha sido amiga de mis padres desde hace muchos años”, detalló sobre su primera experiencia laboral.
En un litigio de marzo de 2015 entre la empresa Trigeant Holdings LTD y Pdvsa ante la Corte de Bancarrotas del Distrito Sur de la Florida, Estados Unidos, Medina Mejías figura como Coordinador de litigios y reclamaciones de la oficina de Gestión de Asuntos Internacionales de Pdvsa, con oficina en Caracas. Aseguró haber participado en muchos arbitrajes internacionales de inversión que involucraron a compañías como ExxonMobil y Conocophillips y que fueron resueltos en la Corte de Arbitraje Permanente de La Haya, en la Cámara Internacional de Comercio de Francia o en el Centro Internacional de Arreglo de Diferencias Relativas a Inversiones (Ciadi).
También fue invitado por la suegra del expresidente de Pdvsa a ocupar la silla de la ONU. “Debido a mi experiencia en mediación y resolución alternativa de conflictos fui invitado a participar en el Consejo de Seguridad y en las Naciones Unidas, lo que fue una oportunidad excelente para representar a mi país”, dijo.

El linaje Medina

Isaías Medina Mejías es hijo de Isaías Medina Serfaty, senador durante el Gobierno de Rafael Caldera, y de Carmen María Mejías. Medina Serfaty, a su vez, es producto de la unión entre el expresidente de Venezuela (1941-1945) Isaías Medina Angarita y Estrella Serfaty, madre del dramaturgo Isaac Chocrón. Hay un cuarto Isaías en el árbol genealógico y fue alrededor de él donde se formó la idea de que los Medina que aún viven lo hacen rodeados de riquezas y lujos.
El primero de enero de 2016, un Porsche plateado se estrelló a toda velocidad contra unos árboles y un poste de luz en Key Biscayne, Florida, Estados Unidos. Daniela Benavides Sanmiguel, quien estaba sentada en el asiento trasero del auto, falleció al instante. Según el expediente del caso Isaías Andrés Medina Pardo, el conductor, no tenía licencia de conducir. En el carro fueron halladas unas bolsas con Xanax (tranquilizante) y marihuana. Estas sustancias también fueron halladas en su sangre.
El diplomático habló por primera vez a un medio de comunicación sobre este caso. “Sí, es mi hijo y yo lo quiero muchísimo. Mi hijo Isaías, el primero de enero del año pasado, sufrió un accidente vehicular, bueno, como le puede pasar a muchos niños. Él me llamó ese mismo día, el primero o el dos de enero y yo inmediatamente me trasladé a verlo. Tenía ocho años sin verlo. He intentado desde entonces mantener el mayor contacto posible. Obviamente yo me siento muy triste por las cosas que ha vivido él y más que todo por la pérdida de la vida de una joven que estaba en el vehículo, a quien expreso mi completa solidaridad y soporte a su familia”, explicó.
Al ser consultado por el estilo de vida ostentosa de su hijo respondió: “Yo me divorcié de su madre; un divorcio un poco…(silencio). Bueno, como todos los divorcios, ningún divorcio es fácil. Ella se quedó con la custodia, se fue a vivir con mi hijo a Estados Unidos, se casó con otra persona, el padrastro de Isaías, que era una persona muy adinerada. Él tenía un penthouse en Key Biscayne, un Porsche, una cantidad de bienes de lujo”. De acuerdo con Medina Mejías, el padrastro de su hijo es un socio de una afamada multinacional.
A la pregunta sobre sus ingresos por parte de la Cancillería venezolana respondió con risas. “No creo que me vayan a cancelar los pasivos laborales. Pero el problema no es solo para mi, es para todos los diplomáticos a quienes nos adeudan tres y cuatro meses durante más de un año y ocho meses. En Estados Unidos no es fácil vivir con las deudas y quiero decir que realmente ser un diplomático de Venezuela amerita tener mucho corazón y querer trabajar por tu país, porque por dinero no es”.

El abogado multifacético

La inquietud por los desarrollos turísticos es otra herencia de su padre. Y a eso se dedican las dos empresas en las que el nombre del exfuncionario aparece como parte de la junta directiva: Inversiones Caribe Mar (Venezuela) y Metrospaces (Delaware, Estados Unidos).
“Mi papá tuvo un hotel que se llamaba Hotel Playa El Agua. Luego cayó en la expropiación de aquellas medidas de Caldera en la Procuraduría (…) cuando mi papá falleció, yo intercambié un terreno que nos quedó por la herencia, por una parcela en la Isla de Coche y empecé a construir un hotel desde hace como 15 años atrás. Realmente de los 15 años que llevo construyéndolo, quizás un poquito más, llevo como 25% construido. En verdad, han pasado varios socios, porque la situación de Venezuela no es nada fácil”. Asegura estar esperando algunos pagos por la cesión de acciones de sus empresas.
Saltó al paso y señaló que fue socio del consultor político Juan José “J.J” Rendón en un conglomerado de 16 empresas dedicadas al mercadeo y la publicidad. También fue aliado de Juan Carlos Sosa y de Rafael “Papaleco” Lacavalerie, hijo del presentador de televisión “Musiú” Lacavalerie. Estudió en las Universidades Católica Andrés Bello del Táchira y Santa María en Caracas y fue secretario accidental de la junta directiva de la empresa CVG Industria Venezolana de Aluminio, C.A. (Venalum).
En adelante, son múltiples las ocupaciones que se atribuye: fundador de la cooperativa de transporte entre El Yaque y la Isla de Coche y abogado de la asociación de pescadores de Cubagua; conductor de un programa de televisión y radio llamado “Derecho de respuesta”; presidente de la primera asociación de kitesurf de Venezuela. Surfista, kitesurfista, paracaidista, futbolista, buzo y productor ejecutivo del documental “The last straw”, sobre la contaminación de los océanos con residuos de plástico.
Es presidente de la Organización no gubernamental “We Care2030”, dedicada a temas ambientales. Participó como representante de Venezuela ante la ONU en varios encuentros sobre Justicia Internacional, conservación de la salud de los océanos y criminalización de actos de guerra. Fue electo como el relator de la Sexta Comisión del 71° período de sesiones de la Asamblea de Naciones Unidas.
Medina aseguró no tener planes de solicitar asilo político en Estados Unidos; por el contrario, asegura que quiere “ser libre de ir a Venezuela cuando lo necesiten”, además de “asistirlo en Estados Unidos o en cualquier lugar del mundo donde sea necesario”. “Yo estoy completamente a la orden”, prometió.

Lea también:VIDEO | Maradona, chavista y madurista

Miles de venezolanos en las zonas más desconectadas del país visitan El Pitazo para conseguir información indispensable en su día a día. Para ellos somos la única fuente de noticias verificadas y sin parcialidades políticas.

Sostener la operación de este medio de comunicación independiente es cada vez más caro y difícil. Por eso te pedimos que nos envíes un aporte para financiar nuestra labor: no cobramos por informar, pero apostamos porque los lectores vean el valor de nuestro trabajo y hagan una contribución económica que es cada vez más necesaria.

HAZ TU APORTE

Es completamente seguro y solo toma 1 minuto.

Ayúdanos a cubrir todo el país
Hazte Superaliado/a