Caracas.- Este martes 11 de abril se cumplieron 36 días de la desaparición del joven Andrés Eloy Torres Luque, de 24 años de edad. Sus familiares hicieron énfasis en que se investigara a un exfuncionario del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin), quien tiempo atrás prometió a Torres gestionarle unos papeles de propiedad de unas tierras en Barinas que pertenecían al joven desaparecido.
En vista de que este hombre no le dio respuesta sobre su actuación para conseguir que el Ministerio de Tierras le devolviera la propiedad a Andrés Eloy, este advirtió que lo denunciaría a las autoridades por estafa, acción que cumplió el 3 de febrero y al mes desapareció.
Fue visto por última vez a través de una cámara de seguridad cuando salió de su casa, en Catia, a realizar trabajos de remodelación y albañilería que tenía pautados para ese 7 de marzo.
«Es un muchacho tranquilo y trabajador, es licenciado en administración y debido a la situación del país se dedicó al oficio de albañil. Hace un año y medio que vive en Caracas, fecha en la que decidió llegar para reclamar las tierras que le fueron quitadas. El único problema que tenía era con ese hombre del Sebin«, detalló su hermano Leonardo Torres, quien junto a otros familiares acudió, este 11 de abril, a la Fiscalía para denunciar a Anthony Andrés Aponte, el exfuncionario del mencionado organismo de inteligencia.
Cicpc detiene a dos funcionarios que cometían extorsiones en Caracas
Como no era usual que se ausentara, su familia y novia denunciaron su desaparición enseguida ante la División de Víctimas Especiales del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc). Allí se enteraron que el exfuncionario del que sospecharon fue expulsado de la institución por cometer los delitos de estafa y extorsión, tal y como lo detalló el familiar.
Según el seguimiento que realizó la policía científica al caso, ese 7 de marzo Andrés Eloy fue captado en una cámara de seguridad cercana a su vivienda. A través de la grabación se constató que ese día salió a trabajar con su bolso de herramientas.
Su hermano precisó que ingresaron a su correo electrónico, donde ubicaron el GPS de su celular que registró ese día que de Catia fue a Gato Negro y luego, por motivos que desconocen, su teléfono se encontraba en el barrio El 70 de El Valle. De allí en adelante los funcionarios y la familia perdieron la pista.
«Tenemos grabaciones de las llamadas donde el exfuncionario del Sebin le acepta que le debe dinero y nosotros tomamos como amenaza la forma en la que él trató a mi hermano», precisó Leonardo Torres.
Representantes del Ministerio Público atendieron la denuncia hecha por sus parientes y aseguraron que las investigaciones para dar con su paradero están en curso. Su hermano dijo que desconocen el nivel de las averiguaciones que inició el Cicpc ya que, según dijo, le insistieron a los funcionarios a cargo que revisaran otras cámaras de seguridad para determinar con quién se encontró; sin embargo desconocen si lo hicieron.
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