El Tigre.- Saciar el hambre de su hijo de un año edad le costó la vida a una adolescente de 15 años, quien tenía cinco meses de gestación. La joven subió a una mata de mangos y cayó de una altura de 20 metros, aproximadamente.
La tragedia ocurrió este lunes 5 de febrero en el patio de una humilde vivienda ubicada en la calle Piar del sector Meneven, de El Tigre, sur de Anzoátegui. En esa morada residía Lisbeth Andreína Yánez Chaurán junto a sus padres, un hermano y su pequeño hijo.
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La quinceañera se trepó en el árbol, como acostumbraba a hacerlo todas las mañanas, para alcanzar unos mangos y desayunar con su pequeño, ya que sus parientes no cuentan con los recursos económicos para comprar alimentos.
Fue este martes 6 de febrero cuando se hizo público el fallecimiento de la adolescente, cuyo cuerpo aún en horas del mediodía permanecía en la morgue de El Tigre, en espera de la autopsia.
La muchacha murió como consecuencia de un traumatismo abdominal cerrado y fracturas múltiples, que provocaron además la muerte del feto. Los parientes de la jovencita afirman que su vida se pudo salvar si los médicos le hubiesen prestado la debida atención.
En las afueras de la morgue, Isbelia Chaurán relató que mientras su sobrina estaba trepada en el árbol, pisó una rama que se rompió y cayó. Al escuchar el golpe, sus familiares corrieron y la llevaron al hospital Guevara Rojas cerca de las 8:00 am.
“Cuando llegamos no la atendieron, sino que la dejaron en una cama y no le colocaron nada. Tampoco nos dijeron qué necesitaban. Tres horas después de que la trajimos fue cuando pidieron un yelco 22, y mientras salimos a buscarlo se murió. Pero se murió por culpa del médico de guardia”, aseveró Chaurán. La pariente precisó que en ningún momento le pidieron hacerle exámenes, un eco o radiografía. Por tal razón cree que la joven pudo sobrevivir.
En la residencia de la joven, otra tía que no se identificó contó que la adolescente siempre se subía a tumbar mangos, porque no le gustaba que su hijo llorara por hambre. Dijo que como era de contextura delgada, colocaba una silla para llegar a una rama y de allí subir a coger los frutos. La mujer acotó que la muchacha era madre soltera y cursó estudios hasta tercer año de bachillerato.
Para los Yánez Chaurán, la tragedia no culminó con la muerte de la quinceañera y el bebé que esperaba, pues este martes aún buscaban la manera de recolectar dinero para el sepelio de la muchacha. El costo de la urna es de 12 millones 500.000 bolívares.
A pesar de que solicitaron ayuda a la Alcaldía de El Tigre, solo consiguieron que la institución les diera la fosa en el cementerio general. Según indicó el ente, no cuentan con recursos.