Caracas.- «Aun siendo un proceso fisiológico normal y esperado, la menopausia sigue siendo un tema tabú entre muchas mujeres, pero esta no debe verse como alto negativo». Con esta reflexión inició la internista y endocrinóloga Lisbeth Torres su participación en el forochat «Claves para entender la llegada de la menopausia», realizado el jueves 20 de julio, a través de WhatsApp, y en presencia de 657 lectores de El Pitazo.
Durante su exposición, la especialista apuntó que la menopausia corresponde al término de la fase reproductiva de las mujeres y que solamente puede diagnosticarse cuando hayan transcurrido 12 meses desde la última menstruación, nunca antes.
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“La menopausia ocurre generalmente entre los 45 y 55 años de vida, que es cuando se puede considerar una edad normal. Sin embargo, hay situaciones en las que no es así y se habla de otros tipos de menopausia que tienen ciertas consecuencias asociadas y deben ser tratadas adecuadamente”, comentó, para luego listarlos:
Menopausia precoz: aquella que sucede antes de los 40 años. Es considerada patológica, pues habitualmente está relacionada con trastornos crónicos, autoinmunes, nutricionales, hormonales y tratamientos como la quimio o radioterapia.
Menopausia temprana: la que ocurre entre los 40 y 45 años. Su incidencia es menor que la precoz, pero generalmente se acompaña de mayor riesgo cardiovascular y óseo.
Menopausia tardía: es aquella que se presenta más allá de los 55 años y es erróneo pensar que está bien porque llegó más tarde. Sus factores de riesgo son la neoplasia endometrial, sangrados anormales y hasta el cáncer endometrial.
La endocrinóloga apuntó que la menopausia en sí misma también tiene dos fases adiciones, llamadas premenopausia y posmenopausia, que traen consigo cambios en el eje hormonal de las mujeres.
La premenopausia se subdivide en dos etapas:
Etapa temprana: que va marcada por la disminución en la cantidad de folículos ováricos funcionales, pero siguen produciéndose concentraciones hormonales normales. “Generalmente, no requiere medicación, solamente cambios en el estilo de vida”, añadió la invitada.
Etapa tardía: que se alcanza cuando la producción de estrógenos comienza a caer debido a la menor cantidad de folículos funcionales. “En este caso ya no se logra la producción hormonal idónea, pero todavía es suficiente para evitar los síntomas generales de la menopausia”, agregó.
Luego viene la fase posmenopáusica, que ocurre a partir de los 12 meses posteriores al diagnóstico de la menopausia e igualmente se subdivide en 2 etapas:
Posmenopausia: “el periodo entre el primer y quinto año posteriores a la menopausia. Se caracteriza por un aumento en la resequedad vaginal, los cambios conductuales, emocionales y bochornos. Habitualmente requiere tratamiento”, indicó Torres.
Posmenopausia tardía: que va desde los cinco años hasta la fecha de muerte. En ella aumenta el riesgo cardiovascular y de osteoporosis, razón que empuja a cumplir tratamientos y hacer seguimiento.
Los síntomas menopáusicos
Durante el forochat, la especialista fue consultada sobre los principales síntomas asociados a la menopausia. Torres respondió a esto revelando que la sintomatología es numerosa, pero generalmente común en la mayoría de casos. Ante esta situación, la internista decidió reunir los síntomas más comunes en cinco grandes grupos:
Síntomas vasomotores: como calorones, bochornos, sensación de sofoco y sudoración nocturna. Pueden presentarse hasta en el 80 % de las mujeres.
Síntomas neuropsíquicos: cambios de humor, irritabilidad, depresión, insomnio, ansiedad, disminución de la líbido y poca concentración.
Síntomas mucocutáneos: como la resequedad vaginal, que fomenta las infecciones urinarias y vaginales. También la dispareunia (dolor al tener relaciones sexuales) o la disuria (dolor al orinar).
Síntomas cardiovasculares: aumenta el riesgo de hipertensión, infartos y accidentes cerebrovasculares, fruto de la pérdida de protección vascular que otorgan los estrógenos.
Osteoporosis: que es la pérdida de densidad mineral ósea, un problema que puede presentarte tanto por la baja producción de estrógenos como por mala alimentación.
Sin embargo, y para finalizar, Torres expresó que cada mujer es un mundo y por ello lo mejor es no automedicarse y acudir a un médico especialista para hacer un seguimiento apropiado a este proceso.
La especialista cerró el evento invitando a todas las mujeres a no temer a la menopausia y aceptarla como un proceso natural de su cuerpo que no las hace menos mujeres ni menos capaces.
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