Por: Vanessa Acosta
Por cuarto año consecutivo, la Escuela de Educación de la Universidad Católica Andrés Bello (UCAB) realizó el estudio Sistema de Evaluación de Conocimientos en Línea (SECEL), cuyos resultados, que fueron presentados el pasado 27 de noviembre, revelaron que los alumnos de primaria y bachillerato tienen serias deficiencias formativas en materias fundamentales.
De acuerdo con la medición, 7,53 puntos sobre 20 en matemáticas y 9,11 sobre 20 en habilidad verbal son las calificaciones que, en promedio, tienen los alumnos de bachillerato. El estudio se basó en más de 23.000 pruebas diagnósticas aplicadas a estudiantes de instituciones públicas (52,79 %) y privadas (47,21 %) de seis entidades: Caracas, Miranda, Bolívar, Nueva Esparta, Lara y Zulia.
Así lo explicó el profesor Carlos Calatrava, director de la Escuela de Educación de la UCAB, quien puntualizó que las áreas evaluadas fueron las materias fundamentales del currículo escolar: matemáticas, habilidad verbal, ciencias sociales, ciencias naturales, química, biología e inglés.
“Lamentablemente, y como tenemos ya unos tres años haciéndolo entender al país, de acuerdo a nuestra recolección de información y a nuestros análisis, en Venezuela no es que podemos hablar de ninguna, de poca o de regular calidad de la educación, sino de inexistencia de la calidad de la educación venezolana”, resaltó.
Asimismo, agregó que la brecha entre colegios públicos y privados se mantiene. “No hay diferencias marcadas entre la escuela pública y la escuela privada. Si en habilidad verbal tenemos 9,11, las escuelas públicas y subvencionadas están en 8,37 y las escuelas privadas están en 10,15. Y si vamos a matemáticas, recordemos que tenemos 7,53 nacional, las públicas y subvencionadas están en 7,26 y las privadas están en 7,76. Nuestros números literalmente lo que nos están diciendo es que eso de que la educación privada es mejor que la pública es un mito, es una leyenda”, agregó.
En ese sentido, sostuvo que la única diferencia es que en los planteles privados se cumple con el calendario escolar y se imparten las jornadas completas de clases, de lunes a viernes; mientras que en las públicas, se aplica el horario mosaico.
“Estamos hablando de casi 7 millones y medio de niños y jóvenes en Venezuela que están reportando estos números. Esto nos da una fotografía dolorosísimamente cierta de cómo está el sistema educativo”, subrayó.
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