Las computadoras forman parte fundamental de nuestra vida diaria. Bien sea por estudio o trabajo, siempre necesitamos una a la mano para cumplir con nuestras tareas.

Sin embargo, algunas veces estas máquinas nos juegan una mala pasada a la hora de cumplir nuestros objetivos. Pocas cosas pueden ser tan frustrantes como trabajar con una computadora lenta, especialmente cuando tenemos alguna fecha límite de entrega para una asignación.

Ya sea porque esté tardando una eternidad en arrancar, iniciar un programa, o simplemente abrir y cerrar ventanas, un ordenador lento puede hacer que trabajar sea aún más doloroso.

Aunque muchas veces estas señales ameritan que llevemos la computadora a hacer alguna revisión más profunda, existen algunas cosas que podemos hacer desde casa para resolver esta situación.

A continuación te presentamos tres problemas que pueden poner más lenta tu máquina y cómo resolverlos:

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-Ejecución del antivirus: El software antivirus puede ralentizar tu sistema mientras analiza activamente tu ordenador en busca de malware y virus. En lugar de dejar que el antivirus escanee cuando lo considere oportuno, prográmalo para que se ejecute en momentos en los que no estés usando el PC.

-Muchas aplicaciones en el escritorio: Si tu computadora tarda mucho en responder después de iniciar sesión en tu cuenta de Windows, es probable que tengas demasiadas aplicaciones que intentan ejecutarse al inicio, es decir, tienes muchas aplicaciones en el escritorio. Puedes editar la lista de aplicaciones y servicios que comienzan a ejecutarse cuando inicias sesión en tu ordenador abriendo el Administrador de tareas y haciendo clic en la pestaña Inicio. Revisa la lista y elimina todo lo que no necesitas que se abra cuando enciendes el PC.

-Pestañas de internet: Tu navegador podría ser el culpable de que tu PC vaya lento, especialmente si has perdido la cuenta de la cantidad de ventanas y pestañas que tienes abiertas. Intenta poner un límite al número de pestañas que usas en simultáneo y ahórrate malos ratos.