Caracas.- 110 indultos a opositores, periodistas, sindicalistas y actores sociales acusados de diversos delitos, fuero otorgados mediante un decreto por el gobernante Nicolás Maduro el lunes 31 de agosto, a pocos meses de las elecciones parlamentarias del 6 de diciembre.
La ONG Foro Penal indicó que de la lista de ayer, solo 50 están actualmente privados de libertad: el resto estaba asilado, exiliado o en la clandestinidad. Las medidas no incluyen a los policías metropolitanos acusados y condenados por los sucesos del 11 de abril de 2002.
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Hoy aún se recuerda a Héctor Rovaín, Arube Pérez, Erasmo Bolívar y Luis Molina, los cuatro funcionarios de la Policía Metropolitana aún presos en la cárcel de Ramo Verde. Tienen 17 años injustamente detenidos y no se les otorgan las medidas judiciales que corresponden.
Por su parte, los comisarios Henry Vivas y Lázaro Forero pagan su condena, 30 años de prisión (pena máxima), a través de medidas humanitarias de casa por cárcel por las graves enfermedades que padecen. Lo mismo sucede con el sargento Julio Rodríguez, según reseñó Tal Cual.
El comisario Iván Simonovis estuvo entre los pasillos del Sebin, también en Ramo Verde y su casa, donde fue enviado luego de acumular 19 patologías ocasionadas por el encierro. El 16 de mayo de 2019 escapó del arresto domiciliario, que había recibido el 19 de septiembre de 2014.
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El funcionario de la PM Marco Javier Hurtado es, hasta la fecha, el único liberado por los sucesos de 2002. Su boleta de excarcelación se emitió en enero de 2020 a pesar de que debió salir en libertad el 15 de diciembre de 2019. Había sido condenado a 16 años 8 meses.
De los nueve funcionarios del extinto cuerpo policial, sentenciados por las muertes de Erasmo Sánchez y Rudy Urbano, solo cinco han salido de los barrotes de Ramo Verde. Mientras, familiares y amigos de Rovaín, Pérez, Bolívar y Molina exigen a diario justicia y su libertad.
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