Barcelona.- Como crítica califica la cadena de propagación de COVID-19 en el estado Anzoátegui, la autoridad única del Instituto Atónomo para la Salud (Saludanz), Omar Aray, quien reveló que en la entidad no se ha aplanado la curva de contagio.
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“Los casos no han disminuido. La situación que se está planteando desde el Gobierno nacional de que están disminuyendo los casos y aplanado la curva, eso no es cierto”, reveló Aray, durante una entrevista realizada en el programa radial de Alexis Rosas, transmitido por Unión Radio, la tarde de este 22 de octubre.
El presidente de Saludanz explicó que los números han disminuido porque se está enviando una menor cantidad de pruebas al Instituto Nacional de Higiene (INH), luego de que se les disminuyera la recepción de muestras por día.
“Hay una situación bastante crítica. Nosotros hemos venido proponiendo que no se hagan las pruebas en un solo sitio porque están centralizadas. Nosotros teníamos un promedio de envío de pruebas a Caracas de 120 a 140 y se nos disminuyó a más del 50%. Si disminuye la prueba que van al Instituto Nacional de Higiene evidentemente que también van a disminuir la cantidad de casos”, resaltó.
Aray indicó que esta medida sólo aporta una sensación de que la situación está controlada, sin embargo, la experiencia de los galenos les hace presumir que los contagios no han disminuido, resaltando que la mayoría de los pacientes han comenzado a atenderse en sus hogares.
“Cuando tú le dices a la gente que los pondrás en aislamiento por 20 o 30 días piensan que allí no le garantizarían la vida ni la comida, por lo que piensan que es mejor estar sus casas y le pagan a los médicos para que vayan a atenderlos”, dijo.
El representante del sector salud en el estado Anzoátegui informó que la epidemia se ha trasladado hacia el sur de la entidad y que el epicentro se encuentra actualmente en la ciudad de El Tigre, lo que dificulta la atención inmediata, pues a muchos galenos se les imposibilita el traslado por falta de combustible.
Resaltó que desde hace 15 días, en el Instituto Autónomo para la Salud del estado Anzoátegui, han observado que la mayoría de las muertes registradas obedecen a pacientes menores de 60 años y a jóvenes, cuando al principio de la pandemia los casos se presentaban en personas de la tercera edad.
“Tenemos experiencia de haber tratado la primera parte, pero será un problema serio si se presenta un rebrote, como efectivamente ocurrirá, porque no tenemos insumos médicos y tampoco protección con equipos de bioseguridad. Los médicos estarán cada vez más expuestos”, agregó Aray, resaltando que el costo del tratamiento contra el COVID-19 cada vez está más costoso e inalcanzable para los pacientes.
La autoridad única del Instituto Autónomo para la Salud en el estado Anzoátegui exhortó a los lugareños a retomar las medidas de prevención para evitar la propagación y contagio del virus, asegurando que hasta ahora la vacuna más afectiva es el uso de tapaboca, lavado de manos y mantener el distanciamiento social.
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