Cumaná.- A pesar de la crisis que afecta al país, los cumaneses no dejaron de asistir a la tradicional bendición del mar este Domingo de Resurreción. Los pescadores y el pueblo asistieron a las costas del golfo de Cariaco, este domingo 21 de abril, a darle gracias a Dios por sus maravillas y bendiciones.
El Arzobispo de Cumaná, Jesús González de Zárate, ofició por primera vez la Santa Eucaristía del Domingo de Resurrección, que se realizó como todos los años en la avenida Cacique Maragüey (Perimetral), frente al restaurante «La Negra».
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Monseñor destacó la presencia en la eucaristía de los feligreses de diferentes lugares de la capital del estado Sucre, que se reunieron a orillas del mar a celebrar con alegría la resurrección e implorar a Dios porque mantenga todas las bendiciones que derrama sobre su pueblo.
«Hemos bendecido al mar, para que sea una fuente de alimentos y trabajo para este pueblo que lo necesita. Dios bendiga a los cumaneses y cumanesas en este día y a toda Venezuela con el don de la paz», afirmó González de Zárate.
«Todo los domingos de resurrección asisto a esta misa; este año hay más gente que el año pasado. El nuevo arzobispo realizó una buena misa», afirmó Rafael Malavé, quien recordó, que cuando terminaba el oficio religioso soltaban varias palomas, pero con la crisis que vive el país hasta las aves «se perdieron y se fueron volando a otro lado».
Francisco Lara, unos de los feligreses presentes en la eucaristía, comentó que los pescadores se suman a esta celebración para pedirle al Padre Creador salud y buena pesca. Para Cumaná y Venezuela, que esta bendición sea una bendición infinita.