Un grupo de jubilados protestó este martes, 12 de abril, frente a la Basílica de Nuestra Señora de Chiquinquirá para exigir el aumento de las pensiones a montos que les permita cubrir su alimentación y la compra de sus medicinas.
Los pensionados hicieron una parodia sobre el viacrucis que padecen a diario para sobrevivir en Venezuela con una pensión de 30 dólares mensuales. Las personas de la tercera edad se acostaron al mediodía en un suelo caliente y bajo el sol incandescente que resplandeció en Maracaibo este martes. Se tendieron frente a las puertas de la Basílica, donde está la reliquia de la Virgen de Chiquinquirá.
Los protestaron aseguraron que una pensión de 30 dólares mensuales no les alcanza para comprar sus medicamentos y alimentos. Ese pago apenas equivale al 7% de la canasta alimentaria, que se ubicó en marzo en 425 dólares, según la Cámara de Comercio de Maracaibo.
Jubilados sobreviven
“Es una tragedia y una fatalidad lo que vivimos los pensionados. Son pensiones de hambre que no nos permiten comprar comida y menos los medicamentos. Ante esa situación nosotros vamos a seguir reclamando nuestras pensiones, para que estén acordes con el costo de la canasta básica familiar”, dijo Carlos Petit, organizador y vocero de la protesta.
Elvis Morillo, otro manifestante, relató que los jubilados viven un calvario porque tienen pensiones de miseria. “Yo no me imaginé que después de trabajar tanto estemos mendigando para que nos den lo que nos corresponde para poder comer, tener medicinas y vivir”, agregó.