Cabimas.- El derrame petrolero que hay en las costas del Lago de Maracaibo continúa afectando la faena de los pescadores de Cabimas, en el estado Zulia, que están paralizados por el daño que ha causado el crudo a sus embarcaciones.
La densidad del petróleo tranca los motores, además de manchar las redes con las que salen a pescar en las aguas del lago, situación que los mantiene preocupados, porque es su única entrada económica.
Septiembre y octubre es temporada para la venta camarones, lo cual representa la forma de ingreso de más de 70 pescadores de los sectores Punta Icotea, Las Tierritas, La Rosa y R1.
José Murillo, uno de los pescadores de la zona, también solicitó a las autoridades que realizaran seguimiento a la distribución de gasolina en las estaciones de servicio para pescadores, ya que los funcionarios de la Guardia Nacional les impiden llenar sus pimpinas.
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“Nosotros tenemos permiso especial porque con combustible es que limpiamos las embarcaciones y hasta nuestras extremidades, pero los funcionarios dicen que no podemos llenar pimpinas si no pagamos”, explicó.
La crisis de gasolina que hay en la Costa Oriental del Lago también afecta su trabajo, porque sin la limpieza de redes y equipos no pueden salir a su faena diaria.
Aunque el olor a gasolina es fuerte y a muchos les causa fatiga, es la única opción para retirar el crudo que tienen en su cuerpo, coincidieron varios de los pescadores.
La directiva de Petróleos de Venezuela (Pdvsa) continúa sin ofrecer respuesta a la denuncia de pescadores y habitantes de varios sectores afectados por los botes de crudo.
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