Por Andrea Barrios
Más de 40.000 habitantes de El Jebe, en Barquisimeto, permanecen sin agua por la explosión de un tubo matriz el 6 de febrero. La comunidad se organizó este jueves 16 para llegar en autobús hasta la sede de Hidrolara y exigir la sustitución inmediata de la tubería y el restablecimiento del servicio.
El dirigente vecinal del sector, Gustavo Zerpa, explicó que a la comunidad le llegaba agua los días martes, jueves y sábado, con una duración aproximada de 16 horas, tiempo que les permitía a los hogares un suministro completo. Sin embargo, a mediados de enero, la ingeniera de Hidrolara Yanet Méndez se acercó al sector para informar que, por problemas del Sistema Alto Tocuyo, disminuiría el suministro a una vez por semana.
Esta alteración elevó el nivel de presión en la tubería matriz y ocasionó su explosión el 6 de febrero. Desde entonces tienen que comprar tanques de 1.000 litros, a un costo de 10 dólares, para el consumo de un hogar durante siete días, detalló Zerpa.
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«Nosotros veníamos haciendo llamados a la Gobernación del estado y a la hidrológica para que tomaran cartas en el asunto, porque ya había algunos sectores que no les llegaba agua por problemas con el maniobrero; otros porque no se abren completas las llaves”, sumado a que la tubería matriz tiene 50 años, denunció el dirigente vecinal.
Tres horas para ser atendidos
La comunidad se organizó para trasladarse en un autobús particular a las 7.00 a.m. hasta la sede de Hidrolara. En el lugar fueron informados por cuerpos de seguridad que serían atendidos. Sin embargo, no fue sino hasta las 10:15 a.m. cuando se les dio entrada a cinco representantes de las distintas comunidades de El Jebe.
Carmen Peraza, adulta mayor de 69 años, expresó: “yo no creo que cada vez tengamos que salir a manifestar para que nos den los servicios, ahora esperamos que nos atienden desde las siete de la mañana; yo soy diabética e hipertensa y tuvimos que salir a la calle por este problema del agua, no creo que sea justo”.
No pueden costear la compra de agua
Por su parte, María Peraza, otra habitante del sector, destacó que como ella hay muchos que no pueden costear la compra de un tanque de agua que ronda los 10 a 12 dólares semanales porque, además de necesitar para su hogar, también surte las casas de vecinos que no pueden trabajar porque son discapacitados.
Así como todos los afectados, exige una solución inmediata a la grave situación, porque la mayoría de la población es de adultos mayores y discapacitados, que cuentan con escasos recursos económicos y no pueden costear gastos adicionales en sus hogares.
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