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domingo, 28 abril, 2024

Venezolano en Miami llena de arte los zapatos de famosos

Los cantantes Thalía y Micro TDH lucen los zapatos pintados a mano por el zuliano Ángel Portillo, quien descubrió que su afición infantil era una oportunidad para destacar en Estados Unidos. Hoy personaliza diferentes piezas que muestra en su Instagram @By_Porti, donde acumula más de 80.000 seguidores

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Caracas.- No todos encuentran su pasión al primer intento. En el caso de Ángel Portillo, tras haber emigrado a Miami, Estados Unidos, fue cuando descubrió el área a la que quería dedicarse: el arte y la pintura. Así es como crea By Porti (@By_porti), una tienda online de Instagram donde muestra zapatos deportivos y otras piezas intervenidas con su propio arte.

Portillo cuenta a El Pitazo que nació y creció en Maracaibo, Zulia, y antes de comenzar sus estudios universitarios decidió irse a Estados Unidos durante un año a estudiar inglés. Luego regresó a su ciudad natal para estudiar Derecho. Logró graduarse de abogado en 2012.

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«Desde pequeño estuve muy interesado por la pintura. Nunca estudié (arte), pero siempre tuve instrumentos para practicarlo. Fue mi hobby y pasatiempo en mi niñez. Durante la adolescencia, dejo a un lado la pintura y comienzo a jugar fútbol, béisbol, salgo con amigos y luego empiezo la universidad, por lo que pasé más de 20 años sin volver a pintar o tocar un pincel», dice el zuliano.

De Maracaibo a Miami

Portillo decidió hacer un posgrado en Nueva York, por lo que al finalizar la licenciatura viaja al país norteamericano con ayuda de la Comisión Nacional de Administración de Divisas (Cadivi). «Luego de casi un año de hacer el posgrado, Cadivi aún no había aprobado nada de mi matrícula. Mi papá, debido a la inflación que hubo en ese momento, decide que era hora de regresar a Venezuela, pues no podía seguir manteniendo ese alto costo de universidad y estadía allá».

En 2014, regresa a su país natal y permaneció hasta 2016. Ese año, tras sufrir un robo en su casa, decidió emigrar a Miami. Al regresar al país norteamericano, decide optar por el asilo, pero hasta la fecha no ha sido llamado para la entrevista de su caso.

«Como abogado, yo mismo armo mi caso de asilo y lo interpongo. Desde entonces (abril de 2016) sigo esperando la fecha para la entrevista, sigo con mi estatus pendiente, sin decidir», dice Portillo.

Nace By Porti

«Una vez llego acá a Miami, me toca como a todos buscar cualquier fuente de ingreso y es cuando comienzo a pasear perros, vender productos puerta a puerta, aplicar para delivery. Hasta que utilizo aplicaciones como Uber y Lyft para generar ingresos, lo cual hice durante dos años y medio. Pero, la verdad es un trabajo agotador y que no me veía haciendo por mucho más tiempo», cuenta Portillo.

Al tener en su mente el deseo de encontrar un trabajo que le generara felicidad, comodidad y suficientes ingresos para mantenerse, gracias a un amigo comienza a trabajar con turbinas de aviones. «Entro en la parte de limpieza de partes, luego coordinador de partes y justo cuando por fin había cumplido con mis horas y prácticas para pasar a ser mecánico y poder tener un mejor puesto de trabajo, llega la pandemia y cierra la compañía», dice.

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«Me tocó volver otra vez a las aplicaciones de delivery y otros trabajos que hice al comienzo de mi viaje como migrante. Justo allí, retomo la pintura como una manera de desestresarme, pero esta vez pintando sobre zapatos deportivos», cuenta el zuliano.

Luego de recibir comentarios positivos por parte de sus seres queridos, Portillo se atrevió a mostrar su arte en redes sociales: los usuarios quedaron encantados con su trabajo. La viralidad de sus piezas lo ha llevado a colaborar con diferentes marcas y que cantantes famosos como Thalía y Micro TDH le encargaran zapatos personalizados.

El venezolano asegura que cada pieza que crea, sea un mural, instrumento musical, zapatos u otras prendas, es completamente única y busca que la esencia de la persona que se quedará con la obra pueda plasmarse.

«Siempre tuve mi pasión delante y nunca lo vi. Después de tanto tiempo, volver a pintar y relacionarme con el arte durante la pandemia, fue un antes y un después en mi vida adulta. Encontrar mi pasión y propósito en la vida ha dado un giro para bien a mi etapa de migrante», expone Portillo.

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