La concejala de Maracaibo, Milagros Vílchez, corroboró este lunes 7 de julio que su hija, Limyuth Salazar Vílchez, está viva y es atendida por la ONG Médicos Sin Fronteras en el refugio Bajo Chiquito, dentro de la inhóspita selva del Darién.
“Todavía está convaleciente, está delicada de salud. La están atendiendo en el punto Bajo Chiquito. Hablamos muy poco, porque ella tiene la voz muy bajita, está muy apagada. Está descompensada. Ella tiene que recuperarse ahí para poder salir de la selva”, dijo la concejal, quien habló con su hija unos minutos por videollamada.
La historia de Limyuth Salazar se conoció luego de que se viralizó en redes sociales un video en el que un grupo de migrantes socorrieron a la joven de 32 años, quien estaba sola y sin poder caminar en medio de la selva, frontera de Colombia y Panamá.
La concejala contó que una trabajadora del refugio vio el video en el que pedía el favor de comunicarse con su hija para saber si estaba viva. “A Dios, gracias que ese mensaje fue escuchado y me llamaron para poder ver a mi hija”, dijo.
Migrantes venezolanos rescatan a joven zuliana en la selva del Darién
Vílchez supo del paradero de su hija por los migrantes que intentaron ayudarla. Fueron tres grupos los que la avanzaron hasta llegar al refugio donde recibe atención médica. “Los compañeros con los que ella viajó la dejaron sola porque la vieron muy mal. Ella se comió un pan con atún y comenzó a vomitar, y se descompensó. Ella no podía caminar por el dolor en las piernas y que tenía los pies reventados”.
La dirigente de Acción Democrática indicó que el primer grupo que la rescató la avanzó en una camilla hasta un punto dentro de la selva. “Ella es muy grande y pesa mucho. Había grupos de migrantes que la iban avanzando, hasta que unos maracuchos fueron los que terminaron de llevarla hasta el punto donde está”.
Busca progreso
Limyuth Salazar salió el domingo 30 de julio con una maleta de su casa en el sector 18 de Octubre de Maracaibo, estado Zulia, con rumbo a Estados Unidos. La travesía la llevaría a cruzar siete países y la densa y peligrosa selva del Darién, donde murieron hasta junio de este 2023 al menos 27 migrantes, según las autoridades del Servicio Nacional de Migración panameño.
“Ella no veía estabilidad. Ella quería sentirse productiva, quería progresar, tener sus cosas, vivir bien, con limitaciones económicas, pero tranquila”, contó la concejal Vílchez.
Dijo que su hija intentó en varias ocasiones irse del país, pero que ella la persuadía para que no lo hiciera hasta que no pudo más. “El sábado en la noche la conseguí haciendo las maletas, y me dijo: ‘me voy’. Yo le dije que dejara los inventos y me dijo: ‘sólo necesito tu apoyo, dame tu apoyo’. Y la comencé a ayudar a hacer las maletas porque la ví decidida”, comentó.
TAMBIÉN TE PUEDE INTERESAR
Miles de venezolanos en las zonas más desconectadas del país visitan El Pitazo para conseguir información indispensable en su día a día. Para ellos somos la única fuente de noticias verificadas y sin parcialidades políticas.
Sostener la operación de este medio de comunicación independiente es cada vez más caro y difícil. Por eso te pedimos que nos envíes un aporte para financiar nuestra labor: no cobramos por informar, pero apostamos porque los lectores vean el valor de nuestro trabajo y hagan una contribución económica que es cada vez más necesaria.
HAZ TU APORTE
