Por Daniela Goncalves (*)
Caracas.- Un periodista venezolano decidió irse a Uruguay en el 2014, junto a su esposa y su hijo de 10 meses, con la ilusión de continuar ejerciendo su profesión. El caraqueño Raúl Martínez emigró dispuesto a trabajar en lo que fuese necesario para mantener a su familia, pero sabía que una cosa no era negociable: abandonar su pasión por informar.
La dificultad para conseguir la leche y los pañales de su pequeño impulsó a Martínez, a sus 32 años, a dejar Venezuela. Sin embargo, su comienzo en el país sureño no fue sencillo, pues llegó sin empleo y tuvo que empezar a trabajar en una fábrica para poder costear el alquiler y los gastos de su hogar.
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En una entrevista para El Pitazo, detalló que preparó dos currículos: uno “de guerra” (para conseguir cualquier empleo) y otro profesional (con su experiencia como periodista y fotógrafo). “Creo que no hubo medio de comunicación al que yo no le mandara un currículo. Me convertí en un spam. Siempre lo hacía como tarea”, señaló.
Al mes de haber llegado a Uruguay se enteró de que su esposa esperaba un nuevo bebé, por lo que decidieron que ella volviera a Venezuela a completar el embarazo, mientras él se quedaba “guerreando”.
El sueño que comenzó en Linkedin
Luego de haber escrito a múltiples medios solicitando empleo, en 2015 le escribió por Linkedin al director de la Agencia EFE en el Cono Sur, quien le dijo que lo tendría en cuenta por si se abría una vacante. Para sorpresa del caraqueño, al mes fue llamado para una entrevista.
“Le gustó mi curriculum por mi trabajo audiovisual y de fotografía”, agregó, al detallar que a pesar de que el periodismo de agencia es diferente al diarismo al que estaba acostumbrado, adaptarse no fue complicado gracias a su experiencia profesional, la cual después de un año le permitió comenzar en el área de la fotografía.
Fue así como comenzó a vivir lo que consideró un sueño: cubrir pautas, como la final de la Copa Sudamericana en Paraguay, la Copa América en Brasil y las protestas en Venezuela durante los inicios de Juan Guaidó.
Además, pudo estar en diciembre en Argentina cuando ganaron el Mundial de Fútbol. “Nunca había visto tanta gente en la calle. Fueron cuatro días de locura en los que dormí muy poco, pero a la vez muy satisfecho, porque eso es una oportunidad histórica”, relató.
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Sin embargo, las posibilidades de crecimiento y los desafíos a enfrentar no se detuvieron, pues en septiembre de 2022 asumió el puesto de director de EFE en Uruguay. El caraqueño se convirtió así, según narra, en el primer fotógrafo que pasó a ocupar el cargo.
“El hecho de que sé escribir, hacer entrevistas y contar historias me ayudó mucho”, acotó.
“A Uruguay le estoy agradecido infinitamente”
El periodista Raúl Martínez, egresado de la Universidad Arturo Michelena, del estado Carabobo, asegura que a Uruguay le agradece muchas cosas, como el que sus hijos cuenten con educación y salud pública.
“Para criar niños es bueno, porque es un país estable, seguro y tranquilo. Uno como venezolano valora esas cosas”, indicó.
Martínez extraña las playas de Tucacas, en Falcón, pero tiene como próximas metas seguir adquiriendo experiencias que le permitan continuar preparándose, ya que no descarta en un futuro irse a otras delegaciones más grandes de la agencia EFE.
(*) Programa de Formación de Nuevos Periodistas
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