Barinas.- El desmantelamiento de su sistema de ventilación y la reasignación de sus áreas de servicio como depósito de comida, son algunas de las irregularidades que los trabajadores de la biblioteca central “Don Rómulo Gallegos” de la Universidad Experimental de los Llanos Occidentales Ezequiel Zamora (Unellez), denunciaron ante las autoridades rectorales de esa casa de estudios.
En un largo documento firmado tanto por los empleados como por más de 200 estudiantes y docentes, indicaron que la biblioteca fue diseñada en 1981 bajo estándares nacionales e internacionales con una visión de crecimiento de servicios y de usuarios a 20 años en un área de 4700 metros cuadrado.
No obstante, los últimos años los espacios han sido utilizados inadecuadamente porque han sido cedidos de forma inconsulta y sin criterios técnicos, tal es el caso de la Biblioteca de Postgrado, que fue asignada al comedor para un depósito de alimentos, generando ratas y plagas por no existir un control sanitario adecuado poniendo en riesgo las colecciones y la salud de los trabajadores y usuarios de esa dependencia.
Explican que las otras áreas cedidas, no son las ideales para coexistir con este ambiente por ocasionar ruidos y ecos; además de dispersar las colecciones, además, otorgan parte del espacio de otra de las Salas al Archivo Central de la Unellez, disminuyendo los servicios en tamaño, sin la ventilación y climatización adecuada para la conservación del acervo documental e incrementando el problema, por ser colecciones que ya traen problemas de contaminación.
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En el documento, los trabajadores refirieron que al inicio del nuevo semestre, de manera inconsulta, desincorporaron dos máquinas de aires acondicionados de 30 toneladas cada una, que estaban operativas y pendientes por mantenimiento, demostrando de esta manera que quienes tomaron Ia decisión, desconocen y dan poca importancia al acervo documental de la Unellez, así como al personal de la biblioteca y a sus usuarios.
Aunado a esto, se suman las consecuencias que van a derivar de esta inconsulta decisión que afectará la salud de los trabajadores de la Biblioteca Central de la Unellez, que fue demostrado en un estudio científico realizado en el año 2003 por personal calificado (microbiólogos, médicos laborales, dermatólogos, otorrinolaringólogo, entre otros).
Estudio fue avalado por Inpsasel, el cual determinó un alto nivel de contaminación en esta área, detectándose casos graves de salud del personal como una lobectomía pulmonar en un trabajador, así como otros problemas de salud ocasionados por microorganismos en el ambiente.
Los denunciantes recordaron que cada gestión los ha esperanzado con solucionar el problema bajo el argumento de la falta de presupuesto, pero consideran inadmisible que sean desincorporadas estas unidades de aires acondicionados sin atender la problemática y sean reubicados en otra área que no requiere vital atención como es la biblioteca.
Aclararon que de mantener esta decisión, traerá consecuencias negativas al deterioro progresivo y acelerado de la colección más importante de la región de los llanos afectando a la comunidad estudiantil y a todos usuarios que hacen uso de ella, así como el deterioro de la salud de todos los trabajadores que cumplen funciones en dichos espacios, perdiéndose todo el trabajo realizado por una empresa externa en el año 2014 que efectuó una limpieza de la colección y las áreas de la Biblioteca Central, que permitió la reapertura de sus servicios después de un tiempo sin funcionar por contaminación extrema.
Finalizan el documento, aclarando que en el caso particular que concierne al archivo central de la Unellez, no se puede reubicar dos ambientes de riesgo en un mismo espacio, dado que maximiza en extremo la problemática de contaminación tanto para el personal de estas unidades de información, como para la ubicación y adecuación a espacios que estén libres de contaminación y no generar más problemas de salud a los trabajadores y daño al patrimonio documental de la universidad.
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