Guanare.- Carlos Alirio Villamizar Amaya, de 89 años de edad, quiere volver a su Colombia natal. Desde el Centro de Diagnóstico Integral (CDI) de El Cantón, estado Barinas, espera por el apoyo oficial de su país para un retorno seguro.
El anciano está enfermo, sin familia y solo cuenta con voluntarios sociales de la Alcaldía del Municipio Andrés Eloy Blanco.
Villamizar Amaya fue abandonado el 7 de agosto en el CDI Manuelita Sáenz. Está en cama con un diagnóstico médico reservado y no cuenta con familia en Venezuela que pueda velar por su salud, confirma la concejala María Gabriela Chacón, quien se ocupa de la situación del anciano, junto con voluntarios de Cáritas.
Cáritas de Venezuela y la oficina de desarrollo social de la Alcaldía de Sucre se hicieron responsables de la alimentación del anciano. También, dos enfermeras de la comunidad brindan apoyo diario para el aseo personal.
En una cruzada solidaria, la comunidad de El Cantón colabora con los requerimientos de exámenes y tratamiento, precisó Chacón.
Bomberos socorren a abuelo desnutrido y abandonado en una casa de Maracaibo
El paciente ha dicho a los voluntarios que tiene familiares en Bucaramanga, departamento de Santander, Colombia, y en San Cristóbal, estado Táchira.
Un documento de identidad emitido por el Consulado de Colombia en Barinas en 1984 certifica que Villamizar Amaya es oriundo de Guaca, municipio de la provincia de García Rovira, Santander.
«Necesitamos hacer contacto con algún familiar», refiere Chacón en un empeño porque el mensaje llegue a las autoridades del vecino país para que estás gestionen la ayuda humanitaria necesaria para el reencuentro de Villamizar Amaya con su familia.
La salud del anciano empeora cada día, este 14 de agosto amaneció con vómito de sangre, y se presume una hemorragia interna, advierte la concejala Chacón. «Es necesario referirlo a un hospital, pero sin familiares es complicado», aseguró.
De acuerdo con las indagaciones de Gabriela Chacón, Alirio Villamizar Amaya fue sacerdote en Colombia. Luego de abandonar los hábitos se vino a Venezuela, donde se asentó y trabajó en la zona de La Gabarra y Chorrosquero, estado Apure. No tiene hijos ni esposa.