Táchira.- Las calles de San Cristóbal están ocupadas por cola de gasolina. La mañana de este 9 de mayo, en las ocho estaciones de servicio habilitadas había carros esperando para poder surtir de combustible. En los meses de 2024 en San Cristóbal, capital del estado Táchira, se había normalizado el despacho.
Maricely Quintero, abogada, llegó a la gasolinera Ana Even a las 7:00 de la mañana. La cola estaba a más de 10 cuadras de distancia de la bomba. Pese a la lluvia y la espera que le tocaba, se quedó en la fila porque en Táchira el despacho se hace por terminal de número de placa, así que si no echaba hoy, le tocaría en tres días nuevamente.
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«No tenemos calidad de vida en lo absoluto. Nos paramos de madrugada porque llega el agua, no vivimos ni trabajamos porque se va la luz a cada rato. No vivimos en paz, siempre hay algo con lo que nos humillan», relató.
De igual manera Juan Martón, estudiante, desde una cola de combustible, contó que no fue a la universidad porque sus papás son personas de la tercera edad y no quería exponerlos a la larga espera. Consideró que ya sufren suficiente con el colapso de los servicios públicos.
«Mis papás pasan el día angustiados de cuándo se va o vuelve la luz. Nos paramos a lavar de madrugada cuando llega el agua. Es invivible, no hay tranquilidad. La gasolina era lo único que medio funcionaba y volvimos a pasar tres horas esperando por 40 litros que pagamos en dólares», explicó.
En Táchira la venta de combustible es únicamente a precio internacional. Las limitaciones para los vehículos son de 40 litros máximo cada vez que el organismo encargado publica el terminal de número de placa.
Sobre estas colas no hay información oficial de las autoridades en materia de combustible.
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