Personal médico reporta precariedad en centros de salud de Mérida

Oriana García-Programa de formación Nuevos Periodistas

Mérida.- Los principales centros de asistencia médica en Mérida, el Hospital Universitario de Los Andes (HULA) y el Instituto Venezolano de los Seguros Sociales (IVSS), se encuentran en situaciones de gran precariedad. También enfrentan un déficit de personal y escasos recursos con los cuales atender a la gran cantidad de pacientes que reciben.

Mientras, desde las redes sociales del HULA han reportado la entrega de medicamentos, la adquisición de insumos y el mantenimiento de sus instalaciones. No obstante, las condiciones de estos centros de salud son críticas, según el personal que allí labora y pacientes.

Para dar mayor cobertura a la situación, El Pitazo entrevistó a empleados de ambos centros. Estas son las declaraciones de una de las doctoras del HULA, quien quiso mantener su identidad en reserva.

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–¿Cuál es la situación actual?

-El Hospital Universitario de Los Andes o el Castillo Gris, como muchos de nosotros le decimos, en aspectos económicos, de seguridad, salud y mantenimiento, se encuentra en mal estado. Sobresale más lo político, que el empeño por cubrir y reparar las carencias y necesidades que hay, sobre todo, porque no se defienden los derechos de los trabajadores que se encuentran allí y no se protege la salud del paciente. La indolencia que hay a escala gubernamental, la falta de estímulo salarial y la inseguridad en las áreas alrededor del hospital, son reflejo del estado en que se encuentra el HULA.

–¿Cuáles son las necesidades y carencias que hay en el hospital?

-Son amplias. Actualmente, son más críticas, debido al salario, ya que hay múltiples renuncias por parte del personal de la salud, sobre todo, del equipo de enfermeras. En cuanto a necesidades, los insumos, básicamente, son muy pocos para la necesidad de los pacientes que hay. Todo lo que el paciente necesita debe comprarlo, en su mayoría. Otra necesidad es el mantenimiento en las instalaciones, por ejemplo, hay filtraciones, la infraestructura está deteriorada y hay una latente necesidad de modernización.

–Como profesional de la salud, ¿cuáles son sus mayores desafíos?

El desafío más importante es que el paciente pueda recuperarse, con los pocos insumos que se tengan a la mano, porque ahorita prácticamente trabajamos con las uñas. No es fácil encontrarse en el escenario de no tener las herramientas básicas para poder abordar o darle la atención adecuada a un paciente, sobre todo en las áreas donde debe estar, como es el caso de la deficiencia en quirófano. Las máquinas de anestesia se han dañado y eso hace que haya menos quirófanos y menos turnos para los pacientes.

Esto hace que se alargue la lista de espera para los pacientes que ameritan una operación, lo que trae como consecuencia que las patologías con las que llega un paciente se agudicen y este termine con mayores complicaciones que las que tenía cuando llegó al hospital.

Sin embargo, el desafío más grande es que como profesionales tengamos nuestras necesidades cubiertas para poder cumplir la labor como médicos, de la mejor manera. Nos mantenemos de pie por la misericordia de Dios, porque son mayores los gastos que se tienen para venir al hospital, que lo que cubre nuestro sueldo actual.

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Situación en el IVSS

“La situación del Seguro Social es igual que en todos los centros asistenciales en Mérida. Hay falta de personal, falta de insumos, falta de mantenimiento de las áreas que se han deteriorado. Hay muchas deficiencias y daños en casi todas las áreas”, expresó Morella Rondón, del equipo de enfermeras.

Las zonas donde los pacientes se encuentran hospitalizados, se han visto colapsadas y en ocasiones las mujeres terminan en el área de Pediatría y los hombres en áreas de Observación, según Rondón. Aseguró que hacen lo posible para que el paciente pueda tener los medicamentos que se le piden y que no haya complicaciones debido a la falta de aparatos e insumos.

El HULA, con 51 años de trayectoria, es considerado en Mérida uno de los mejores de la región andina, según opiniones de pacientes y el personal de salud de otros centros asistenciales. Cuenta con un gran número de especialistas de las diferentes ramas de la Medicina.

Las carencias y deficiencias de infraestructura, equipo médico e insumos tanto en el HULA como el Seguro Social persisten y se intensifican con el tiempo.