Mérida.- El Observatorio de Derechos Humanos de la Universidad de Los Andes (ODH-ULA), en Mérida, denunció que en los estados andinos (Mérida, Táchira y Trujillo) no se pueden cumplir las medidas de prevención y atención ante el coronavirus recomendadas por la Organización Mundial de la Salud (OMS). La institución hizo la denuncia mediante una nota de prensa institucional difundida este jueves, 19 de marzo.
El ODH-ULA señala que las constantes fallas en los servicios básicos, la falta de suministros médicos y sanitarios -así como las condiciones precarias de los hospitales centinelas de los tres estados- y la desinformación, aunada esta última a casos de amedrentamiento a quienes denuncian las carencias que impiden hacer frente a la pandemia en la región, son los principales obstáculos para enfrentar el coronavirus.
Sin agua ni otros servicios básicos
El ODH-ULA reporta que sectores de Mérida, Táchira y Trujillo pasan varios días e incluso semanas sin recibir agua por tuberías, lo que les impide a los habitantes de estas entidades cumplir con la medida preventiva de lavarse las manos con frecuencia.
«Otros servicios básicos esenciales para la vida cotidiana no funcionan debidamente en los estados andinos. La región sufre cortes diarios de energía eléctrica sin ningún tipo de planificación. Muchos de esos apagones son generales, por lo que afectan incluso las áreas prioritarias donde funcionan los centros de salud», indica el ODH-ULA en su nota de prensa.
El aumento de escasez de combustible para vehículos y la de gas doméstico en la región también es denunciado por el observatorio ulandino, así como las fallas en los servicios de telecomunicaciones.
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Hospitales sin suministros ni condiciones
El ODH-ULA señala que los cuatro hospitales centinelas ubicados en la región andina no cuentan con suministros suficientes para la atención de pacientes sospechosos de contagio por coronavirus, así como tampoco poseen los equipos ni los espacios adecuados para la atención de casos positivos de COVID-19.
En cuanto a los kits distribuidos en los dos hospitales centinela de Mérida, el observatorio de la ULA denunció que estos eran insuficientes y carentes del sistema de bioseguridad para el tratamiento de pacientes con el COVID-19. «Dichos kits llegaron en cajas que indican ‘Paquete para Cirugía Oftálmica’ y no para la atención específica de la nueva enfermedad que causa el coronavirus. El ODH-ULA denuncia que los kits carecen del sistema de bioseguridad recomendado para el manejo de los pacientes que sean positivos para COVID-19«, precisa la nota de prensa.
Desinformación y amedrentamiento
El ODH-ULA resalta que las fallas en los servicios de telecomunicaciones presentes en la región andina, aunadas a los cortes diarios del servicio eléctrico, impiden a la población acceder oportunamente a información sobre la pandemia.
Asimismo, el referido observatorio rechaza las detenciones ilegales y el amedrentamiento en contra de personal médico y sanitario de la región por denunciar la falta de suministros básicos para atender casos por coronavirus. «La detención del enfermero Rubén Duarte, trabajador del Hospital Central de San Cristóbal, es una muestra de una política estatal de censura para ocultar las debilidades que tiene el país para enfrentar esta pandemia», asegura el ODH-ULA.
El observatorio de la ULA ha solicitado en reiteradas ocasiones a los organismos competentes soluciones a las fallas en los servicios básicos y ha publicado en sus informes las condiciones en las que se encuentra el Instituto Autónomo Hospital Universitario de Los Andes (Iahula), principal hospital centinela de Mérida.
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