La renuncia de los abogados de la reconocida firma Squire Patton Boggs, quienes estaban a cargo de la defensa de Efraìn Campo Flores, podría deberse a presiones del Fiscal Preet Bharara, quien habría exigido que se aclara el origen de los fondos con que eran pagados los costosos honorarios de los abogados defensores.
Según conocedores del caso, el acusado y su familia son los que deben dar respuesta a esta exigencia. La justica estadounidense debe comprobar que el dinero que llega a manos de los abogados no provenga de actividades ilícitas.
Testimonios, documentos contables, declaraciones de impuestos, registros bancarios y registros de negocios son algunos recaudos que habrían sido exigidos para verificar el origen de los fondos.
Según Cuentas Claras Digital, Citgo fue durante 2014 el cliente más importante al contratar los servicios de los abogados de Squire Patton Boggs, en el área de petróleo y gas por el orden de 1 millón 70 mil dólares.
De acuerdo con el portal Politico, el bufete ha sido un importante contribuyente de la senadora demócrata Mary Landrieu de Luisiana a lo largo de varios años por un monto que excede los 75 mil dólares. Esta senadora el año pasado bloqueó una resolución del senado estadounidense para sancionar la violación de los derechos humanos del gobierno de Venezuela.
Los abogados a cargo de la defensa de Efraìn Campo Flores eran John J. Reilly experto en leyes marítimas mientras que Rebekah J. Poston lo es en delitos de cuello blanco.
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