Quito.- El movimiento Revolución Ciudadana, que lidera el expresidente de Ecuador Rafael Correa (2007-2017), denunció el lunes el asesinato de un dirigente local del partido en la parroquia de San Mateo, de la provincia de Esmeraldas, fronteriza con Colombia, Pedro Briones.
Este nuevo suceso se da antes de las elecciones del 20 de agosto, cuando 13 millones de ecuatorianos irán a presidenciales y legislativas.
Varios líderes políticos, dentro y fuera de la agrupación Revolución Ciudadana, expresaron sus condolencias y rechazo por lo sucedido.
La candidata del partido a la presidencia, Luisa González, señaló: «Ecuador vive su época más sangrienta. Esto se lo debemos al abandono total de un Gobierno inepto y a un Estado tomado por las mafias».
En tanto, la Alcaldía de Esmeraldas también lamentó esta nueva acción violenta: “Sumamente consternados por el deceso del director parroquial de San Mateo, Pedro Briones, expresamos nuestras sentidas condolencias a sus familiares y seres queridos”.
El Gobierno colombiano rechazó el hecho y confió en que los culpables sean castigados. A través de un documento añade que Colombia manifiesta «nuevamente su solidaridad al pueblo ecuatoriano, a su dirigencia y a las agrupaciones políticas que luchan por la democracia del hermano país del Ecuador».
Este homicidio ocurre cinco días después del asesinato del candidato presidencial por el partido Movimiento Concertación, Fernando Villavicencio.
Antes del político y periodista también habían sido asesinados de manera similar el alcalde de Manta, Agustín Intriago, y el candidato a asambleísta por Esmeraldas, Ryder Sánchez, de la alianza Actuemos, que lidera el exvicepresidente Otto Sonnenholzner.
También tuvo mucha repercusión el asesinato del candidato de la Revolución Ciudadana a alcalde de Puerto López, Omar Menéndez, ocurrido 24 horas después de una votación de autoridades municipales celebrada el 5 de febrero.
Sobre estos asesinatos, el primer vicepresidente del PSUV, Diosdado Cabello, lamentó los hechos de violencia en Ecuador. El dirigente chavista aseguró que en ese país ha habido un proceso de descomposición por «muchas razones, pero, sobre todo, tiene que ver con quienes han gobernado en los últimos años».
Oleada de violencia
Ecuador vive una espiral de violencia incesante. El año pasado terminó con 25 homicidios por cada 100.000 habitantes, la cifra más alta de su historia.
El Gobierno atribuye esta situación al crimen organizado y al narcotráfico, que se han fortalecido sobre todo en la zona costera de Ecuador, donde han convertido a los puertos del país en lanzaderas para hacer llegar cocaína a Estados Unidos y Latinoamérica.
Por su parte, el alto representante de la Unión Europea (UE) para la Política Exterior, Josep Borrell, advirtió este lunes que la violencia política en Ecuador hace urgente “restaurar la confianza pública en las instituciones y el sistema democrático del país”.
“Para poder mejorar la vida de los ciudadanos a ambos lados del Atlántico y defender la democracia en Europa y América Latina, necesitamos luchar juntos contra el narcotráfico de forma más eficaz. Ecuador puede parecer muy lejano a Europa, pero una parte de nuestro futuro depende de la lucha que se libra en este país para defender la democracia contra el crimen organizado”, incidió el alto representante comunitario a través de un texto.
Con información de EFE