Caracas.- En medio de la pandemia por el coronavirus, Francia se viste de gala para celebrar sus fiestas nacionales. Este año, la conmemoración tendrá un color diferente, alejado de las acostumbradas concentraciones en las principales ciudades del país. Todo como consecuencia de la crisis sanitaria del coronavirus, que ha cobrado la vida de más de 30.000 franceses.
Pero la pandemia no ha sentenciado a muerte el gran desfile organizado desde 1880 en París, en el aniversario de la caída de la Bastilla. Este martes, se rindió homenaje a las víctimas y a los «combatientes» movilizados para luchar contra el COVID-19.
Debido a la crisis sanitaria, el tradicional desfile del 14 de julio de este año adopta un formato especial, sin público. La procesión militar no bajó, como es costumbre, por la Avenida de los Campos Elíseos. Las tropas desfilaron en un círculo en la Place de la Concorde.
LEE TAMBIÉN
Un total de 2.000 soldados, la mitad de los habituales, pasaron revista por el presidente de Francia, Emmanuel Macron, y los 2.500 invitados presentes en las gradas. Entre estos últimos, 1.400 representantes del pueblo francés que estaban en primera línea en el momento más álgido de la epidemia: cuidadores, familias de los fallecidos por el SARS-CoV-2, profesores, cajeros, asistentes de funerarias, policías, gendarmes, bomberos, empleados de fábricas de máscaras o de pruebas, reseñó Euronews.
Pero, ¿cuál es el origen de esta festividad en Francia?
La fiesta nacional francesa se construyó sobre el recuerdo y el sentido de dos eventos de la época de la Revolución Francesa que se centran sobre las acciones del pueblo.
El 6 de julio de 1880, se promulga la propuesta de ley para adoptar la fecha del 14 de julio como día de la Fiesta nacional. El texto precisa que se trata de una manifestación militar, pero no precisa un año de referencia, pues ese día coinciden dos hechos históricos: el 14 de julio de 1789, día de la toma de la Bastilla; y el 14 de julio 1790, día de la Fiesta de la Federación.
La Toma de la Bastilla (una cárcel fortificada en el pleno centro de París), es un día de intervención del pueblo francés en contra de la arbitrariedad de la realeza en materia de justicia y representa su conquista de libertad. Un símbolo del fin de la monarquía absoluta.
En la Fiesta de la Federación, por su parte, se celebra con efusividad el primer aniversario de la insurrección francesa para exaltar los cimientos de la nueva nación federada.
Se trata, entonces, de una celebración que busca destacar el carácter patriótico y militar de los acontecimientos que dieron pie al resurgimiento de Francia como república.
Hoy en día, el 14 de julio sigue siendo un gran acontecimiento. En París, el tradicional desfile militar en la Avenida de los Campos Elíseos se prepara con gran minuciosidad. En todas partes hay bailes, iluminaciones o fuegos artificiales. Una tradición alterada por la propagación del coronavirus por Europa y el resto del mundo.
Miles de venezolanos en las zonas más desconectadas del país visitan El Pitazo para conseguir información indispensable en su día a día. Para ellos somos la única fuente de noticias verificadas y sin parcialidades políticas.
Sostener la operación de este medio de comunicación independiente es cada vez más caro y difícil. Por eso te pedimos que nos envíes un aporte para financiar nuestra labor: no cobramos por informar, pero apostamos porque los lectores vean el valor de nuestro trabajo y hagan una contribución económica que es cada vez más necesaria.
HAZ TU APORTE
