El último cumpleaños de Brayhan Navarro

Ciudad Guayana.- El viernes 9 de agosto, Brayhan Navarro no podía ocultar su emoción, por dos razones: iba a participar en una jornada de partidos de fútbol en Puerto La Cruz y estaba ansioso por la llegada de su nuevo hermanito. Su mamá está embarazada de un varón. Tiene ocho meses.

Viajaron desde Ciudad Guayana hasta Puerto La Cruz. Al llegar, la oncena infantil de Mineros de Guayana y sus familias se hospedaron en varios hoteles, pero los padres de Brayhan decidieron quedarse esos días en la casa de unos parientes. El sábado 10 de agosto se disputaron los primeros dos torneos del campeonato, uno en la mañana y otro en la tarde.

El domingo 11 de agosto, se realizaron los dos partidos restantes. Ese día era especial. Era el cumpleaños de Brayhan, el mediocampista estrella del equipo. Sus padres le compraron una torta y luego se fueron todos a uno de los hoteles donde se estaban quedando sus compañeritos, para celebrar allí sus nueve años. De hecho, festejaron por partida doble, porque el equipo destacó en el cuadrangular y lograron ser subcampeones.

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“El domingo sus padres le compraron una torta de cumpleaños, y al día siguiente, la urna para el sepelio”, dijo Gabriela Roa, la mamá de uno de los compañeros del pequeño futbolista. Fue el último cumpleaños de Brayhan.

Ya en la tarde de ese domingo, la mayoría de los jugadores y sus familias se dispusieron a regresar al sureño estado Bolívar, donde residen. Exhaustos, pero contentos con el resultado obtenido. El papá de Brayhan, Richard Navarro dijo que su hijo le había enseñado de fútbol, y siempre estaba pateando la pelota en cada rincón de la casa. “Yo le decía ‘Brayhan, papi, deja la bulla, deja la pelota que es mediodía’ y él me respondía que me quedara tranquilo, que eso era lo que a él le gustaba”, relató.

Es que no había momento en el que no soñara con ser un gran futbolista, señaló el padre del jugador. Eso lo suscribió la directiva de la Escuela Mineros de Guayana, quien sostuvo que el niño era una promesa del fútbol local, un destacado integrante del equipo que se encargaba de preparar los mejores pases para hacer el gol.

Brayhan no llegó a casa

La familia del niño decidió quedarse un día más para regresar a Ciudad Guayana el lunes 12 de agosto al final de la tarde. Brayhan cantó y sonrió en el trayecto, contó su papá. “Veníamos en toda la vía escuchando música”, señaló Navarro durante el sepelio del menor.

Pero la tragedia llegó cuando unos hombres en un carro vinotinto interceptaron la camioneta familiar en la carretera Anzoátegui-Bolívar. El papá del jugador de Mineros de Guayana retrocedió inmediatamente y, en ese momento, los también llamados “piratas de carretera” dispararon contra el vehículo. Brayhan recibió un disparo en el pecho que lo mató casi al instante. Apenas sobrevivió unos minutos, pues antes de llegar a la clínica más cercana, en El Tigre, murió.

La hipótesis que manejan los organismos de seguridad es de un asalto contra el grupo familiar. Funcionarios de la Guardia Nacional mataron a uno de los supuestos implicados la misma noche del asesinato del niño, mientras que el 14 de agosto, un segundo involucrado murió en Ciudad Bolívar al enfrentarse a disparos con oficiales del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas. A este último lo señalan de ser el autor material del homicidio del futbolista, según la policía científica, porque la pistola que tenía corresponde a la concha de la bala que impactó contra el pecho de Brayhan.