Caracas.- Caraqueños madrugaron este miércoles, 29 de noviembre, para hacer largas colas y renovar su documento de identidad en la jornada de cedulación que realiza el Gobierno hasta el sábado 2 de diciembre, previo al referendo consultivo sobre el Esequibo. A pesar del esfuerzo, gran parte de los usuarios no lograron tramitar su cédula.
Bajo el sol, pero también en medio de la lluvia, los cientos de ciudadanos esperaban información de las autoridades de las oficinas del Servicio Administrativo de Identificación, Migración y Extranjería (Saime) y saber si iban a poder renovar su cédula. Sin embargo, había desinformación y las respuestas eran negativas para las personas.
A las 11:00 a.m., en la sede del Saime de Plaza Caracas indicaron a los ciudadanos que ya se había paralizado la jornada de cedulación porque habían atendido a 1.500 personas, quienes llegaron desde horas de la madrugada a hacer cola.
Lo que parecía sencillo para algunos ciudadanos, terminó siendo más caótico. En el proceso que se realizaba en las sedes del Saime, y no a cielo abierto, se pedía únicamente la fotocopia de cédula de la persona y no una cita a través de la página web como se implementó hace unos meses.
«En esta sede ya no estamos sacando cédulas el día de hoy. Vayan a otra oficina que esté habilitada para el operativo (…) No puedo hacer nada por ustedes», decía en voz alta un hombre identificado con chaqueta del Saime a las afueras de esta oficina en Plaza Caracas.
Los ciudadanos disgustados exigían explicación y pedían la ayuda para ingresar y tramitar su documento, pero no lo lograron. La única opción que les quedó fue retirarse del sitio y acudir hasta otra sede o esperar al día de mañana para acudir nuevamente a esta oficina.
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Operativo improvisado
Una situación similar a la de la Plaza Caracas ocurría en las inmediaciones del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ). Las personas madrugaron en cola, pero no fue sino hasta el mediodía cuando los atendieron y solo les ofrecieron una cita para el día siguiente, pues en el lugar no había sistema para garantizar la jornada.
El ciudadano Ramón Calzadilla aseguró que la jornada de cedulación se realiza en medio de una desorganización y que, por el día de hoy 29 de noviembre, no lograría tramitar su cédula en esta sede porque no había sistema.
Una de las encargadas de ingresar a los usuarios para generarles la cita indicó, desde las afueras del TSJ, que el operativo se lanzó de manera improvisada, a pesar de que las autoridades estaban al tanto de las fallas en el sistema y las máquinas.
Jornada con lentitud
A la 1:00 p.m. la cola superaba a los 500 ciudadanos en la sede del Saime de San Bernardino y aún la persona con el número 198 no había ingresado a tramitar su cédula. Aunque en esta oficina sí estaban atendiendo a los usuarios, el proceso se desarrollaba con lentitud.
«Llegué antes de las 6:00 a.m. y todavía estoy aquí. El proceso es muy lento y lo único que hemos llevado es agua y sol», aseguró Luzmila Peña, una de las caraqueñas que después de siete horas de cola no había podido renovar su cédula de identidad.
A pesar de la espera, aseguró que debía hacerlo porque no tenía su cédula vigente y la jornada era una oportunidad, pero se quejó de la desorganización por parte de las autoridades. Dijo que no había prioridad ni siquiera para los adultos mayores y personas con discapacidad.
En la sede de Las Mercedes, la cola de usuarios superaba también las 500 personas. Cansados y molestos, los ciudadanos permanecían en fila, pero avanzaban con lentitud.
Algunas personas conversaban entre sí y afirmaban que era un abuso tener a los ciudadanos en esta situación en la que «nada era sencillo para gestionar un trámite», de acuerdo con una de las usuarias.
En la parroquia Coche la jornada se desarrollaba de la misma manera. Ingresaban por lotes de 20 personas, mientras decenas de usuarios permanecían durante horas en la cola.
De acuerdo con una de las usuarias consultadas, también les entregaban citas para que acudieran a una determinada hora o al día siguiente. Entre la aglomeración y quejas de ciudadanos se desarrollaba el proceso.
Los ciudadanos quedaron en cola a la expectativa de poder renovar su cédula de identificación, pero sin información por parte de las autoridades.
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