Falta de mantenimiento en el Paseo Anauco genera inundaciones de aguas negras

Caracas.- El Paseo Anauco está ubicado entre las parroquias Candelaria y San Bernardino, desde la avenida México hasta la Plaza La Estrella. Fue creado como un lugar de esparcimiento durante la gestión de Luis Herrera Campins, inaugurado el 22 de noviembre de 1983, y ahora son casi dos kilómetros de basura acumulada, aguas negras empozadas y casas improvisadas bajos los puentes que permanecen en total oscuridad una vez que el sol cae.

Hace una semana, el Instituto Nacional de Meteorología e Hidrología (Inameh) advirtió sobre fuertes lluvias en Caracas y Vargas; pero un par de días antes, vecinos de San Bernardino habían denunciado el desbordamiento de la quebrada Anauco, que pasa justo por debajo del paseo que lleva ese nombre.

Luego más de un día de precipitaciones, el Paseo Anauco se inundó y el agua llegaba casi a las rodillas. Los desperdicios amontonados fueron arrastrados por la corriente de agua y taparon, mucho más, las alcantarillas.

Carlos Julio Rojas, coordinador del Frente de Defensa del Norte de Caracas, cuenta que la última vez que se le hizo mantenimiento al paseo fue en 2013, cuando el entonces alcalde del municipio Libertador, Jorge Rodríguez, anunció el Plan Candelaria, con el que pretendía recuperar los espacios públicos de la parroquia; sin embargo, Rojas recuerda que la ejecución del proyecto no se logró ni en 10%: “Solo arreglaron una parte de la entrada del paseo, que da hacia la avenida México, unos quioscos que hay y más nada”.

Rodríguez, incluso, había asegurado que, luego de la reparación, el lugar tendría una ruta de ciclovía, restaurantes, parques infantiles, vigilancia e iluminación. Según él, la gente podrá caminar desde plaza La Candelaria hasta el Parque Carabobo.

Érika Farías, alcaldesa desde 2017, no retomó el proyecto ni ha respondido a los reclamos de los habitantes de las parroquias Candelaria y San Bernardino acerca de la falta de mantenimiento.

El 20 de septiembre, con la inundación de todo el paseo, trabajadores de Hidrocapital se acercaron al lugar para drenar algunas salidas de agua que dan hacia la quebrada, pero la basura sigue regada a lo largo de los casi dos kilómetros.

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Reinaldo Vega vende flores en un quiosco en la entrada del paseo y cuenta que desde hace dos años no hay alumbrado público. Antes, cerraba su negocio cerca de las 8:00 pm, ahora, no puede pasar de las 6:00 pm. Trabaja allí desde la década de los 80, cuando Claudio Fermín era alcalde de Libertador, y nunca había visto el Paseo Anauco tan abandonado. “Tú les dices a los de la alcaldía que no hay luz ni seguridad, pero nadie te hace caso”, manifestó.

Aunque Carlos Julio Rojas estima que el bulevar comenzó a deshabitarse entre 2003 y 2004. Muchos edificios cercanos tenían salidas que daban hacia la rambla y fueron clausuradas por temor de los vecinos a la delincuencia que se estaba abriendo camino en esos espacios. Ya para 2009, habían cerca de 60 personas en situación de calle viviendo en casas improvisadas bajos los puentes Anauco y República.

El paseo, según Rojas, tiene un valor histórico que los habitantes de las parroquias que se conectan quieren recuperar. Por ese lugar pasaron Humboldt, Bompland, Andrés Bello y Simón Bolívar. “Nosotros sabemos que para recuperar esto no hace falta demasiado dinero, además los vecinos de acá estamos muy comprometidos y dispuestos a habitar el paseo nuevamente, pero el gobierno de Nicolás Maduro y la alcaldía de Érika Farías no están interesados”.