El Callao.- El presidente de la Cámara de Comercio de El Callao, Gustavo Chacín,advirtió que la falta de combustible está agudizándose en la zona sur de Bolívar. Afirma que esto trae como consecuencia, además de las largas filas, paralización del sector comercial y representa una traba en la ejecución de la minería artesanal.
“Hay que recordar que los molinos en las minas dependen de la gasolina para poder funcionar. Debido a esta situación, el comercio está bastante deprimido, porque este es un pueblo que vive de la minería”, apuntó.
Chacín añade que en El Callao hay dos estaciones de servicio, pero actualmente solo funciona una, que registra largas filas. “Se debería buscar la manera de abrir la otra bomba para paliar la situación aquí. Esto es un caos”, advirtió.
También manifestó que los empresarios están trabajando con dificultades porque no pueden viajar a Ciudad Guayana o Santa Elena de Uairén a comprar mercancía.
“Desde hace días no surtimos los negocios y no podemos viajar trayectos largos a comprar productos”, comentó. A esto se suma la restricción para cargar envases con gasolina, pues durante los últimos días y en diversos operativos han sido detenidos varios conductores por llevar «bidones» con combustible en sus vehículos.
La extracción de oro es, en poblaciones como El Callao, Tumeremo, Guasipati y El Dorado, la labor que realiza la mayoría de sus habitantes, y sin combustible deben comprar “pimpinas” a 10.000 bolívares (en efectivo) por litro, dijeron tres mineros consultados por El Pitazo.
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En Guasipati, poblado minero del municipio Roscio, la situación es similar. Un trabajador de esa zona confirmó que hay extensas filas en gasolineras y que en “cada esquina” se pueden ver revendedores de combustible. “Lo más grave es la venta de gasolina clandestina. La gente agarra una pimpina, se para en una esquina, la vende y nadie les dice nada”, contó.
Cabe destacar que en estas zonas no se está aplicando el plan de racionamiento por código de placa. Según informó el gobernador, Justo Noguera, en principio esta “estrategia” solo se ejecutará en Ciudad Guayana y Ciudad Bolívar.
No obstante, el impacto negativo se extiende a toda la entidad, según lo confirma la presidenta de la Cámara de Comercio del estado Bolívar, Zulay López, quien dice que el panorama es grave porque hace cuesta arriba el normal desarrollo de la actividad comercial, fomenta el ausentismo laboral y la deserción escolar en la región.
“Tenemos que abandonar los negocios por largas horas para ir a hacer la cola. Por ejemplo, en Ciudad Bolívar hoy no asistieron muchos alumnos a los planteles educativos, y aunque ahora mismo no tengo las cifras, te puedo decir que la gran mayoría de los trabajadores no asistió a sus puestos de empleo”, señaló la dirigente gremial.
Dijo López que, en algunos casos, los dueños de empresas optan por buscar a sus trabajadores en sus carros particulares o pagarles un taxi, para que los locales no estén sin personal porque, además de la falta de gasolina, el transporte público registra una paralización parcial por falta de suministros, repuestos y mantenimiento, según reiteradas denuncias de gremios asociados a este sector.
Mientras tanto, las autoridades regionales aseguran que el operativo de racionamiento que se inició el lunes 3 de junio pretende eliminar las extensas filas y combatir las «mafias» que revenden gasolina y comercializan puestos en las estaciones de servicio.
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