La Hacienda Santa Teresa dio inicio este jueves, 1 de septiembre, a su evento anual Saca El Pecho Fest, con la quinta edición del Torneo de Rugby Penitenciario. En el evento participaron 12 equipos provenientes de 36 centros de reclusión en toda Venezuela, donde el deporte hace presencia con la colaboración de los entrenadores del Proyecto Alcatraz.
El encuentro que contó con la presencia de equipos femeninos y masculinos, comenzó a las 9:00 am con sentimientos encontrados por parte de los jugadores y el deseo en cada uno por lograr la victoria.
Durante el día se realizaron varias competencias hasta llegar a la gran final, donde las integrantes del Instituto Nacional de Orientación Femenina (Inof) resultaron campeonas nacionales por segundo año consecutivo. Mientras que la victoria masculina se la llevó el equipo Tocorón, del Centro Penitenciario de Aragua, luego de un reñido juego con los internos extranjeros del Centro de Formación del Hombre Nuevo “Simón Bolívar”.
Andrés Chumaceiro, director de Negocio y Marca de Ron Santa Teresa, aseguró que la esperanza de libertad para cada recluso que forma parte de este proyecto, llega a través de un balón de rugby. Ejemplifica cómo a través de los valores de esta disciplina deportiva se pueden insertar a la sociedad en la que anteriormente habían fallado.
«Los mejores equipos que vemos en la Hacienda Santa Teresa son escoltados con la seguridad que le corresponde de sus centros penitenciarios. Llegan escoltados y esposados, pero una vez ingresan a los espacios reciben una atención como invitados especiales. Esas esposas se le quitan, se colocan sus uniformes de reglamento y al salir al campo son recibidos por un túnel de honor hecho por los alcatraces, lo que significa tender la mano a las segundas oportunidades», comentó Chumaceiro.
Cada participante representa un testimonio de transformación y, esto para Andrés Chumaceiro es motivo de aprendizaje, al descubrir cómo la adversidad más oscura tiene la capacidad de ser superada si cada uno se apega a los valores con espíritu deportivo y humildad.
Explicó que el ingreso de los reclusos al proyecto depende de la decisión de cada uno, al igual que ocurre con las bandas criminales que de manera voluntaria deciden formar parte de la iniciativa que fue creada con la intención de reclutar a grupos delictivos completos para reducir la tasa de homicidios en el lugar donde hacían vida de manera negativa.
Este evento permite el reencuentro entre familiares y detenidos, quienes al finalizar las competencias pueden abrazarse y entre lágrimas vivir la emoción que el torneo les brinda. El director de Negocio y Marca de Ron Santa Teresa explicó que muchos de estos detenidos tienen hasta más de un año sin ver a sus parientes y la hacienda les facilita un emotivo encuentro.
Proyecto Alcatraz como espacio de desahogo
Larry Brito, supervisor de los entrenadores que asisten a los centros penitenciarios, comentó que la receptividad es positiva por parte de los privados de libertad porque para ellos, el Proyecto Alcatraz representa un espacio de desahogo y libertad en medio de la situación por la que atraviesan.
«Todos cometemos errores y merecemos segundas oportunidades. Eso es lo que siempre intentamos llevar de primera manera para transformar los pensamientos que puedan adquirir durante el tiempo privados de libertad», aseguró Brito, quien tiene 16 años formando parte del rugby.
Durante la actividad estuvo presente Rugby Cisneros, equipo español que llegó como invitado especial para brindar apoyo técnico a los jugadores penitenciarios. El entrenador de los españoles, Juan-Pi, consideró que la iniciativa de rugby en las cárceles del país es admirable y reconoció el talento que tienen los participantes al momento de salir a un campo.
«No hay ningún gesto desagradable entre los jugadores, se puede ver el respeto entre cada uno y eso es entender las reglas de esta disciplina. Les queda mucho camino por recorrer pero tienen un espíritu admirable», expresó Juan-Pi desde la Hacienda Santa Teresa.
Xabir González, joven de 19 años y miembro del equipo español de rugby, indicó que el interactuar con privados de libertad le hizo tener una percepción distinta a la que tuvo cuando recibió la propuesta de viajar a Venezuela para formar parte del torneo. De igual manera, dijo que cada aporte que pueda dar es gratificante para él, porque todos los reclusos le han mostrado su agradecimiento por poder disfrutar de esta oportunidad.
Concurso Murales que inspiran
Con motivo del 225 aniversario de la Hacienda Santa Teresa y coincidiendo con el Torneo de Rugby Penitenciario, se realizó la inauguración del mural que resultó elegido en un concurso donde participaron más de 250 artistas de todo el país, quienes presentaron sus propuestas y durante varios meses un jurado evaluó cada detalle hasta dar con el ganador.
Jefferson de la Parra, miembro del movimiento Fuga Muralista, resultó ganador de este primer concurso de arte realizado por Ron Santa Teresa. Comentó que la pintura plasmada de 33 metros de largo por 4.60 de alto, es una línea narrativa que cuenta la historia de la hacienda. Este arte llevó 20 días de ejecución, pero la concesión y contextualización duró más de un mes, según explicó.
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